Tijeretazo a la inmigración

Madrid

Los presupuestos que la Comunidad de Madrid va a dedicar el próximo año a políticas de inmigración y de integración social de los extranjeros disminuyen casi un 32%. Este es el dato global, si se profundiza en las cifras todavía es más considerable el descenso del dinero que la Consejería aporta a las entidades sin ánimo de lucro que realizan este tipo de trabajos: es una reducción de casi el 90% del presupuesto.

Esta semana, el Director General de Servicios Sociales de la Consejería, Pablo Gómez Tavira, ha justificado en la Comision de Presupuestos el descenso diciendo que "se ha apostado por la normalización. Este presupuesto no es tan necesario porque los inmigrantes se han integrado y por tanto forman parte de nuestros presupuestos ordinarios". De casi seis millones de euros en 2015 a cuatro millones raspados en 2016. "Hay cifras que muestran un incremento de los delitos de odio, por lo que son necesarios más programas de sensibilización", critica María José Navarro, del PSOE. Críticas que se generalizan en otros grupos de la oposición. Raúl Camargo, de Podemos, ha cuantificado la letra pequeña de los recortes: "la partida para entidades sin ánimo de lucro pasa de 1.670.000 euros en el año 2015 a 190.000 en el año 2016. Es una reducción del 88%". Y todo eso sumado a la llegada de refugiados próximamente a Madrid, como ha recordado Alberto Reyero, de Ciudadanos: "hay que trabajar en la integración de los refugiados, del gran contingente que va a llegar a Madrid en 2016. Hemos solicitado una mayor financiación para esta partida concreta". También preocupa a Ciudadanos el poco dinero que la Comunidad ha presupestado para cooperación al desarrollo, 250 mil euros.

Todo esto en el apartado político, pero las organizaciones afectadas no esconden su indignación. En declaraciones a Hora 14 Madrid, Cristina Manzanedo, portavoz de Pueblos Unidos ha recordado que "hay inmigrantes integrados, pero otras personas no han tenido las mismas oportunidades, por lo que debería seguir invirtiéndose porque es un proceso largo". Manzanedo además ve sorprendente que se tome esta decisión cuando Madrid espera la llegada de refugiados en los próximos meses. "Para que salga bien la integración de quienes estén por llegar lo que hace falta es invertir", ha dicho Manzanedo, quien denuncia que la ayuda inicial que van a recibir es corta, por lo que necesitarán un soporte a largo plazo para, por ejemplo, "aprender español, integrarse en un colegio o lograr un trabajo".