Sufrida victoria del Obra ante el Estudiantes
McGrath fue el mejor en el equipo gallego y anotó un triple decisivo

McGraht fue el mejor en el Obradoiro ante el Estudiantes / Obradoiro CAB

Santiago de Compostela
Cuarta victoria del Rio Natura Monbus Obradoiro en el examen más difícil en el Fontes do Sar en lo que va de temporada. Los de Moncho Fernández tuvieron que trabajar muchísimo para acabar embolsándose el triunfo frente a un combativo Estudiantes (73-71).
Cada arreón del Rio Natura era contestado por los madrileños. En varias ocasiones los santiagueses coquetearon con los diez puntos de renta, pero en todas ellas volvía por sus fueros el cuadro estudiantil para exigir un nuevo esfuerzo al combinado local. Inquebrantable fue la fe de los de Ocampo, tan sobresaliente como la entereza de los de Moncho para no fallar en los momentos clave, para mantener la cabeza fría en un enfrentamiento de alto voltaje.
Fueron varios los hombres del Rio Natura Monbus Obradoiro los que se alternaron el protagonismo: Triguero lideró al principio, Yusta sobresalió a continuación, Bendzius acudió al rescate del Rio Natura Monbus hasta que emergió Waczynski, todo ello gravitando alrededor de McGrath, asistente y ejecutor en el tramo final de la contienda.
En el cuadro capitalino dos jóvenes, Jaime Fernández y Juancho Hernangómez firmaron una actuación notoria. A ellos se sumó Brizuela, acompañado también por Nacho Martín. Estudiantes murió con las botas puestas, pero no pudieron culminar la remontada en el inexpugnable Fontes do Sar.
El partido comenzó con un cálido homenaje a jugadores históricos del Rio Natura Monbus Obradoiro. En la semana en la que se conoció el Quinteto Histórico, Sar aplaudió a rabiar a los tres representantes que pudieron acudir al pabellón santiagués: Oriol Junyent, Ricardo Aldrey y Tonecho Lorenzo. Corbacho y Muscala también fueron homenajeados no presenciales. El salto entre dos entre Oriol y Tonecho, fue el punto y final a la festiva previa del partido.
El Rio Natura Monbus Obradoiro comenzó jugando muy bien, con mucho protagonismo de Juanjo Triguero, bien en ataque, asistido por Caloiaro, y solvente en defensa, con un robo y asistencia para la contra de Bendzius.
En defensa, el Rio Natura Monbus también rendía a un gran nivel. El Movistar Estudiantes era incapaz de sumar de primeras, pero el dominio de la batalla reboteadora – ocho en ataque – permitía puntuar a los colegiales (21-13).
Parecía dominar el conjunto santiagués el envite para deleite de sus aficionados. Era Yusta, por aquel entonces, quien ponía a Sar a sus pies. Acertó de tres, rematando una gran jugada colectiva, atacó sin miedo la zona estudiantil y taponó en defensa a Hernangómez. El trabajo de Santi en los dos lados fue encomiable: lectura de juego de un veterano y potencia de un joven, un cóctel demasiado difícil de parar para Etudiantes.
Parecía una tarde plácida hasta la jugada en la que se enrevesó el partido. Un alley oop entre Pozas y Pustovyi que no subió al marcador por una falta técnica señalada contra el banquillo visitante, desconcertó al Rio Natura Monbus Obradoiro y su afición. Se ofuscaron los gallegos, incapaces de descifrar las múltiples defensas planteadas por Ocampo. El duelo táctico entre los dos entrenadores gallegos fue colosal, bien intepretado por sus hombres que brindaron un espectáculo soberbio.
Crecía Estudiantes amparado en el desparpajo de Brizuela. El joven jugador colegial bombardeaba desde la larga distancia, pero también se aplicaba en defensa y corría al contragolpe. Los visitantes llegaron a ponerse por delante, pero rapidamente emergió Bendzius para rescatar al Rio Natura Monbus Obradoiro (39-37).
McGrath quiso que el Rio Natura Monbus bailase a su ritmo. Cambió la partitura e interpretó una nueva sinfonía, beneficiosa para Waczynski y Bendzius. El base repartió siete asistencias, mientras que los exteriores se fueron hasta los 17 y 12 puntos respectivamente. El tercer cuarto de Adam fue excelso, anotando de tres, de dos y con un precioso aro pasado.
La presión estudiantil, no obstante, seguía dificultando sobremanera la circulación y subida de balón a los obradoiristas. Los de Ocampo creían en la victoria, y se dejaron el alma sobre el parquet para tratar de asaltar el Fontes do Sar. Y estuvieron cerca de lograrlo. Hubo pérdidas y momentos de enorme desconcierto en ambos bandos. El miedo y la tensión estaban latentes, mientras corría el reloj y se decidía la batalla.
Tampoco encontraron la red los triples durante los primeros minutos del asalto definitivo. El partido se convvirtó en un correcalles, pero ni Rio Natura Monbus ni Estudiantes eran capaces de profanar los aros rivales. Mientras, crecían los decibelios en la grada. Casi cinco mil personas defendían los ataques colegiales, bien resueltos, sin embargo, por un vailente Jaime Fernández.
No se arrugó su homólogo en la otra mitad de la cancha. Donnie McGrath clavó dos triples mortales de necesidad y acertó desde la línea de personal. Tiró a fallar los libres defintivos Jaime Fernández, agarró el rebote Hernangómez y los nervios se volvieron a apoderar de la afición.
Quien no tembló fue Yusta, contundente en la captura definitiva, la que suponía la cuarta victoria del Rio Natura Monbus Obradoiro. No fallaron los de Moncho Fernández en Sar, donde volverán jugar en seis días, esta vez contra el FIATC Joventut (sábado, 20:00 h)