El águila de Moyua tiene los meses contados

Bilbao

Su retirada está cada vez más cerca. Tras la declaración de intenciones del Ministerio de Hacienda, del que depende el edificio, cuando hace unos meses reconoció, por escrito, que el águila de Bilbao iba a ser una de las próximamente eliminadas aunque reconocía la dificultad para llevarlo a cabo "dadas las grandes dimensiones del escudo de piedra y su integración en la coronación del edificio, que remata la composición de la fachada", el siguiente paso se ha dado ya.

El arquitecto que debía realizar el informe lo ha hecho y es ahora cuando se va a solicitar a una empresa especializada que se desplace a Bilbao para ver el estado real de la pieza.

Preocupa, nos dicen fuentes de Patrimonio, el estado de los anclajes, es determinante, hasta el punto de que puede ser la clave para decidir si se saca el escudo entero, si se realiza a trozos o si se rellenan los huecos del águila, de forma que se cubra el escudo. Y es que la cantidad de gente que pasa bajo el edificio diariamente y el temor a que algún cascote pudiera generar problemas puede terminar modificando la forma de retirar este escudo preconstitucional, aunque el final de sus días, nos dicen, está cerca.

Lo más inmediato ahora va a ser el desplazamiento de estos técnicos, que subirán hasta lo alto del edificio, medirán, comprobarán esos anclajes y a partir de ahí será el turno de abrir concurso para que la empresa con mejores aptitudes se encargue de su eliminación, en base a las conclusiones del estudio técnico.