Cohetes y aplausos en la reapertura de Coca Cola en Fuenlabrada
Madrid
Después de 20 meses de protestas y de lucha sindical, 85 de los trabajadores que fueron despedidos mediante un ERE de la fábrica embotelladora de Coca Cola Iberian Partners en Fuenlabrada han vuelto a las 7 de la mañana a entrar a la planta. Lo han hecho arropados por sindicatos, familiares y amigos, entre aplausos y cohetes.
Reabre la fábrica como centro lógistico y no de producción, así que este lunes deben incorporarse a la planta de Fuenlabrada todos los empleados con similares funciones a las que tenían antes del ERE, sobre todo, los que trabajaban en servicios de mantenimiento. El resto -135- deberá esperar a que la Audiencia Nacional se pronuncie sobre las reclamaciones (incidencias de readmisión) que interpuso CCOO.
"Al final todo tiene su recompensa, nos sentimos contentos porque después de tantos meses luchando, pero no es una apertura al 100% porque quedan más de 100 compañeros fuera", ha declarado Marcos, uno de los trabajadores que recuperan hoy su puesto, a las puertas de la fábrica. La Audiencia Nacional debe decidir en los próximos días sobre los recursos pendientes.
La empresa ha destacado la posición que ha mantenido durante el conflicto, "de absoluto diálogo frente a un grupo de empleados que ha ocupado durante casi dos años las instalaciones de la empresa en Fuenlabrada y ha boicoteado los productos de la compañía" período en el que se han mantenido sus sueldos de manera íntegra, lo que ha supuesto "un grave perjuicio económico y de imagen".
Según Coca-Cola Iberian Partners, el sobredimensionamiento de la estructura tras la fusión de ocho compañías, "con una sobrecapacidad de producción por encima del 40 %, estaba afectando la viabilidad y el empleo de una plantilla actual que asciende a 4.380 personas".
Tras recordar que el pasado mes de julio Coca-Cola pactó con los sindicatos USO, CGT, CSIF, UGT y CCOO el fin de la negociación del ERE iniciado en 2014, la empresa ha explicado que del total de 840 afectados solo se reincorporarán, tras llegar a acuerdos de salida, unos 300 empleados.