Jornada trágica en el pirineo aragonés
Fallece un hombre tras precipitarse al vacío en el pico Mir y una pareja que practicaba barranquismo en el río Ara
Huesca
El Pirineo aragonés registró ayer otra jornada trágica. Una pareja de barranquistas pereció ahorgada en una poza en el barranco de la Garganta de los Navarros, en el término municipal de Torla cuando descendían el río Ara. Además, un montañero navarro de 67 años y vecino de Ansoaín, que realizaba una travesía en solitario entre dos tresmiles, se precipitó al glaciar de la Maladeta, en el valle de Benasque, desde una altura de 150 metros. Con estas víctimas ya son siete las personas que ha perdido la vida en lo que va de mes en la provincia de Huesca mientras practicaban actividades en la naturaleza.
Los dos barranquistas desaparecidos en Torla han sido localizados sin vida en una poza. Se trata de un hombre y una mujer, de poco más de 30 años, que practicaban barranquismo en el río Ara de esta localidad del Pirineo oscense.
El aviso de la desaparición se comunícó ayer sobre las seis de la tarde por la tercera persona que realizaba con ellos esta actividad. En la búsqueda participaron el Grupo de Rescate e Intervención de Montaña de la Guardia Civil, patrullas ciudadanas y personal del 112. Los cuerpos fueron localizados al final de la tarde.
El GREIM de la Guardia Civil era el encargado de recuperar el otro cuerpo del hombre de 67 años que se precipitó al vacío en el pico Mir. La operación se ha iniciado a las 10 de la mañana, en la cara norte de la montaña, en el término municipal de Benasque. El difunto sufrió una posible caída por una cresta de unos 150 metros que le provocó politraumatismos severos con pérdida de masa encefálica, lo que desembocó en su fallecimiento. El hombre, procedente de Ansoain, recibió la ayuda de 4 especialistas del grupo de montaña de la Guardia Civil de Benasque, 2 pilotos del Helicóptero con base en Benasque, y un médico del 061, según informan fuentes de la subdelegación del Gobierno en Huesca.
