El transbordo entre Sopela y Plentzia trae de cabeza a los usuarios

Bilbao

Están previstos 18 meses de transbordo, hasta que concluyan las obras de soterramiento del paso a nivel de Urduliz, y los primeros días se han visto salpicados por las quejas de los pasajeros habituales. La primera semana se cortó el tráfico ferroviario entre Larrabasterra y Plentzia, y desde que ayer se concluyera la primera fase de los trabajos, se ha avanzado hasta Sopela. La dirección de Metro Bilbao confía en que dando servicio a este último municipio se solucionen los problemas que se han venido produciendo en los últimos días, aunque admiten que todo transbordo "penaliza".

El presidente del comité de empresa, Egoitz Laka, ha trasladado a la dirección un listado con las molestias que se están produciendo porque temen que algunos acaben optando por el transporte privado. Entre las denuncias está que se ha alargado hasta en diez minutos el trayecto con la lanzadera respecto a la duración del metro o que los tres autobuses habilitados se han quedado pequeños para absorver a todos los usuarios. Laka también destaca la "falta de coordinación" entre los horarios de salida y llegada de la lanzadera con las unidades de metro. "Antes de Plentzia a Bilbao tardabas 50 minutos y ahora puede llegar a la hora y cuarto", lamenta. Han sugerido ya a la dirección que incorpore un autobus más o que elimine la necesidad de validar el ticket al subir para agilizar la salida.

La interrupción del servicio entre Sopela y Plentzia es necesaria para agilizar la ejecución de los trabajos que está previsto estén finalizados para el último trimestre de 2016. También se consigue así un ahorro de los costes, según el CTB.