Economía y negocios | Actualidad
VUELO A MUNICH

Un avión de Lufthansa que salió de Bilbao estuvo a punto de estrellarse

15 minutos después de despegar entró en un descenso de 4.000 pies por minuto pero los pilotos consiguieron corregir el rumbo

Bilbao

Ocurrió el 4 de noviembre pero trascendió hace unos días.  El vuelo LH1829 de Lufthansa que cubría el trayecto entre Bilbao y Múnich, operado por un Airbus A321-200, con 109 personas a bordo, estaba en ruta y, trascurridos ya unos 15 minutos, bajó inesperadamente de altitud e inclinación sobre Navarra. Entró en un descenso de 4.000 pies por minuto pero la tripulación consiguió corregir el rumbo y aterrizar con seguridad en el aeropuerto de Munich, como estaba previsto.

A falta de las conclusiones del informe, según la información publicada por Der Spiegel, la pérdida de altitud se debió a la congelación de los sensores que dieron datos erróneos a la tripulación. Los pilotos decidieron entonces desconectar los sistemas y fueron capaces de recuperar la aeronave. La publicación alemana aseguró que Lufthansa registró más de una decena de casos de sensores congelados o bloqueados. El portavoz de Lufthansa explicó que, tras el incidente en noviembre, la aerolínea ordenó reemplazar de inmediato los sensores en 80 aviones de la familia A320.

Las autoridades francesas informaron de que los hechos fueron clasificados como un incidente grave y está siendo investigado por la oficina federal para la investigación de accidentes de vuelo (BFU) dependiente del Gobierno alemán.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00