Políticos y arquitectos debaten sobre el Madrid soñado

Madrid

Madrid camina hacia un nuevo dibujo con varios proyectos en marcha como los de Plaza España, Canalejas, Valdebebas o Chamartín. Y a la hora de realizar ese dibujo el debate parece estar en el método más que en actuaciones concretas. Radio Madrid ha organizado este martes, en el Colegio de Arquitectos, una mesa redonda para intercambiar las visiones de Paz González, delegada de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid; José Antonio Granero, decano del COAM; José María Ezquiaga, arquitecto y sociólogo; Izaskun Chinchilla, arquitecta; y José María Pérez ‘Peridis’, humorista gráfico y arquitecto. La alcaldesa Ana Botella ha inaugurado el acto con un balance del estado actual de la capital y el futuro al que aspira. El acto supone el pistoletazo de salida a los eventos en el marco del 90 aniversario de Radio Madrid, por lo que la regidora ha iniciado su discurso felicitando a la emisora de la SER en Gran Vía 32.

Su intervención ha resumido su legislatura al frente del Consistorio de la capital. Botella ha reivindicado proyectos como el nuevo Mercado de Barceló, la actuación en AZCA o Valdebebas, "una zona de Madrid que tenía grúas cuando no las había en ningún otro sitio". La regidora ha señalado como líneas fundamentales de su gestión la renovación y adaptación de espacios para lograr "sostenibilidad ambiental, económica y social", algo que cree que se ha conseguido con la reducción del tráfico en la almendra central de Madrid, el proyecto BiciMad, la creación de corredores verdes o el mantenimiento de la "cohesión social y territorial".

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El debate que ha seguido a su intervención ha puesto de manifiesto la disparidad de criterios en lo que al diseño futuro de la capital se refiere. La arquitecta Izaskun Chinchilla defendía pasar del urbanismo de crecimiento, "basado en la calificación de terrenos y la expansión", a un "modelo estacionario que haga ciudad sin crecer". Chinchilla promueve un "urbanismo de capital social", en el que las asociaciones civiles tengan un papel importante.

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El decano del Colegio de Arquitectos, José Antonio Granero, ha señalado la necesidad de una apuesta concreta para Madrid y su región metropolitana. "No tenemos muy claro si en Madrid tiene que ser un espacio de ocio ligado al juego, o la ciudad de las Olimpiadas, o si iba a apostar por la cultura y la universidad...".

Granero ha reivindicado el papel de los arquitectos, que en su opinión no han sido suficientemente escuchados. "Siempre estamos más tranquilos cuando al lado del político hay un profesional. Hemos tratado de generar participación en torno a iniciativas concretas, pero determinados proyectos, como Madrid Centro o el eje Prado-Recoletos, no han llegado a desarrollarse. Y hemos dado la espalda a todo un tejido profesional, el de los arquitectos, que hemos despreciado".

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Sobre este asunto y con el proyecto de Plaza de España de fondo, ha girado la principal discusión de esta mesa redonda, entre el propio decano del COAM y la delegada de Urbanismo, Paz González. Granero ha denunciado que durante un año "se ha bloqueado la participación del COAM y de los arquitectos" en la intervención de Plaza de España, a lo que González ha contestado que su participación no fue bloqueada, sino que "se abrió un proceso de participación con los ciudadanos en el que nadie excluyó al COAM, os autoexcluisteis porque pensasteis que los arquitectos tenían que estar a otro nivel".

González también ha hecho un balance general de la gestión urbanística del equipo de Botella: "No habremos acertado en todo, pero hemos intentado generar las bases de una ciudad más amable, habitable y con mejor calidad de vida. Es un tránsito que llevará un tiempo porque las personas tienen que aprender a vivir de otra manera".

El arquitecto José María Ezquiaga ha recordado al Madrid de los 80, el de Tierno Galván, para incidir en la necesidad de una "idea colectiva", de lo que debe ser la ciudad. Ezquiaga ha puesto como ejemplo la Barcelona olímpica, o la Nueva York que "resurgió de sus cenizas tras el 11-S".

Peridis, humorista gráfico y arquitecto, ha dibujado una ciudad en la que ningún coche le dice "date prisa viejo", o que no tenga bares que hacen ruido a las 7 de la mañana: "Sueño con una ciudad sin botellón en el centro. Que cuando salga a hacer footing no tenga que ir al alergólogo y al médico de pulmón, que son dos especialidades distintas. Sueño con una ciudad donde no tenga un pobre que duerme debajo de mi ventana, porque no haya pobres o tengan dónde ir. Sueño una ciudad vividera. Hemos ganado mucho. Pero nos queda mucho por andar. Urbanismo es urbanidad".