Vuelve el rodillo

Valencia

Como ha ocurrido en otras competiciones esta temporada, Valencia Basket no quiso esperar a la recta final de partido para imponer su superioridad y enviar un mensaje directo a Nancy. La Eurocup es territorio taronja.

Lo hizo desde el salto inicial. Y desde la defensa. Tanto que Nancy anotó su primera canasta a falta de 4:15 para la conclusión del primer cuarto. Para ese instante, el equipo que dirige Velimir Perasovic ya mandaba en el marcador por un contundente 13-0. Ocho de esos puntos a cargo de Romain Sato, muy entonado desde el perímetro. Esa fue la renta que supo conservar el conjunto taronja hasta el cierre del periodo inicial (19-6), con un excelente trabajo protegiendo su aro y encontrando vías de anotación exterior y desde el poste medio.

Ante la imposibilidad de conseguir puntos desde la pintura, el conjunto francés acudió al libro de sistemas para buscar jugadas que finalizaran con lanzamientos más alejados. Fue de este modo como llegaron las primeras series de canastas consecutivas a cargo de Nancy. Ryan Reid, Kreyden Clark y Maxime Zianveni asumieron el protagonismo ofensivo para reducir diferencias en el electrónico (35-27). Un triple lejano de Pablo Aguilar y un tiro libre de Lishchuk -que disputaba los primeros minutos tras su lesión muscular- establecieron en doce puntos la renta de Valencia Basket al descanso (39-27).

Tras el paso por vestuarios, Sam Van Rossom pisó el acelerador desde la dirección. Pronto llegaron dos triples librados de Sato y Harangody y, con un mate en transición del belga tras robo, la máxima diferencia de partido (51-32), que obligó a Alain Weisz a solicitar tiempo muerto a falta de seis minutos para el final del tercer periodo. Pese a las constantes modificaciones de quinteto francés, el equipo que dirige Perasovic puso velocidad de crucero. Gran defensa, dominio del rebote… y a correr. Con cuatro puntos consecutivos de Rafa Martínez cerraba el tercero 25 arriba: 61-36.

Disputar una competición de menor dificultad que la Euroliga permitirá, entre otros aspectos, recuperar a jugadores para la causa. Uno de ellos será Pablo Aguilar. El granadino va regresando al nivel que propició su fichaje. Aplicado en el rebote en ambas zonas, además vuelve a ver aro. Su presencia en el cuatro será decisiva ante rivales de mayor enjundia. Otro de los miembros del roster fundamental en los últimos meses de competición será Lishchuk. El tractor taronja recuperó buenas sensaciones en defensa y anotó en los minutos finales tras asistencias de Van Rossom y Lucic. Tarde plácida para Valencia Basket que disputará el segundo partido de este Last32 el próximo día 14 en Krasnodar.

Únete al canal de WhatsApp de la SER