Urkullu: “2015 abrirá un nuevo futuro político para Euskadi”
El lehendakari avisa que la salida de la crisis “no va a ser inmediata, ni sencilla”, pero destaca que “ha cambiado la tendencia”
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Vitoria
En su tradicional discurso de fin de año, el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha apostado por superar la “cuestión vasca” y “acordar un nuevo marco jurídico político que reconozca el hecho diferencial y la realidad nacional de Euskadi”.
En un mensaje muy similar al del pasado año, Urkullu que ha abogado por superar la crisis política y del modelo de Estado, que “obstaculiza el ejercicio y la actualización del autogobierno vasco”.
“Tenemos la oportunidad de dar un paso adelante y avanzar en un nuevo Estatus Político para el futuro de Euskadi” a través del "dialogo, la negociación y el acuerdo” ha defendido el lehendakari.
El lehendakari ha reflexionado también sobre la oportunidad que, a su juicio, se abre en 2015, de fortalecer la paz y la convivencia. En ese sentido, ha subrayado la necesidad de “ser proactivos” para avanzar en "un final ordenado de ETA, su desarme total y verificado, el reconocimiento del daño injusto causado y una gestión penitenciaria distinta”.
También ha reclamado la necesidad de "memoria, verdad, justicia y reparación para todas las víctimas".
Sobre la crisis económica, Urkullu se ha mostrado confiado y optimista, convencido de que 2015 será un año "mejor", aunque también prudente por “la fragilidad del entorno más próximo”.
“Hemos resistido lo peor de la tormenta, pero no pensemos que ya estamos a salvo” ha advertido, si bien cree que ha llegado “el punto de inflexión”, ha cambiado la tendencia que “es más positiva” y “tenemos la oportunidad de volver a crecer y crear empleo”.
No obstante, en su opinión "la salida de la crisis no va a ser inmediata, ni sencilla” y “la economía no crecerá como lo hacía en la década anterior". “No saldremos rápido, pero debemos de salir juntos” ha reclamado Urkullu.
Finalmente, el lehendakari ha expresado su deseo de que todos los agentes implicados en la recuperación económica, la paz y el futuro político de Euskadi sean capaces de “estar a la altura de la oportunidad que se presenta”.
