Moyes ya conoce la 'Veladepedencia'

David Moyes ya sabe lo que es la 'Veladependencia'. Esa bendita enfermedad que sufre la Real Sociedad con Carlos Vela, esa que le permite solucionar partidos cuando están atascados. Es algo que no suele gustar mucho a los entrenadores, porque se sufre demasiado en ataque si la estrella mexicana no parece, pero también es algo de lo que puede presumir el conjunto txuri-urdin con su crack de Cancún. Y el técnico escocés no ha tardado mucho en comprobarlo.Porque la Real ha sido Vela... y poco más.

Carlos Vela ha aparecido con tres chispazos antológicos para hacer más plácido el debut de Moyes delante de su nueva afición, y de paso conseguir la que es ya su primera victoria como entrenador de la Real. Con eso, y con la seriedad defensiva que parece haber imprimido el entrenador escocés (segundo partido seguido con la portería a cero), ha sido más que suficiente para doblegar con solvencia y sin excesivos apuros al Elche.

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El delantero mexicano ha abierto el camino de la victoria muy pronto. Para el minuto 2 de partido, la Real ya ganaba 1-0, algo que ha dado mucha serenidad a los jugadores txuri-urdin. ¡Vela marca ya hasta de cabeza! Golazo a servicio de Carlos Martinez que ha permitido a los realistas crecerse a partir de ahi. O a partir de Vela. Porque cuando el azteca está enchufado todo es más fácil. Él solito ha desatascado a la Real y atascado al Elche, que se ha desecho como un azucarillo y apenas ha opuesto resistencia. Porque el resto de la Real de Moyes ha sido bastante plano. Mucha sobriedad defensiva, mucha presión asfixiante sobre el rival (el escocés no paraba de pedir a sus jugadores que estuvieran más encimas de los futbolístas ilicitanos), pero de ese equipo txuri-urdin que iba a divertir y emocionar a la grada de Anoeta se ha visto muy poquito. Al revés, daba la sensación de que no le importaba que el Elche pareciera llevar la iniciativa para hacer después alguna transición rapida defensa-ataque. El plan no le ha salido mal. Y la puesta en escena, de entrada, no disgusta. Promete, incluso. Pero se antoja escasa si el equipo no crece como pretende Moyes.

El escocés ha tenido que hacer frente también a la tempranera lesión de Imanol Agirretxe, que sufrió un pinchazo de forma fortuíta y tuvo que abandonar el terreno de juego. Salió Finnbogason, que vuelve a dejar frío a la afición. Nada de eso cambió el escenario del partido... gracias a Vela. El mexicano ha dado, incluso, un recital de variedad goleadora: uno de cabeza, otro en velocidad a la espalda de la defensa y el tercero de jugada personal. Anoeta le despidió ovacionada y él se llevó el balón para recordar siempre que la primera victoria de Moyes en la Real llevó su firma. De lo demás, habrá que esperar a que enfrente el escocés tenga un rival que oponga un poco más de opsición para comprobar si lo de esta noche es sólo un espejismo o si es un pasito más en esa evolución que trabaja con tanta intensidad Moyes en Zubieta. De momento, ya tiene su primera victoria, que no es poco. Es un buen primer paso. Pero hay que dar más. Vela le ilumina el camino... así todo es más fácil.