El PP no quiere a Sonia Castedo como alcaldesa de Alicante

"Más vale dignidad que alcaldía". Este fue el mensaje que Génova envió a Alberto Fabra, presidente de la Generalitat valenciana, para que actuara contra ella y el resto de imputados hace ya meses. Los populares temen que Castedo forme una candidatura independiente y se lleve los votos del PP. Ni Mariano Rajoy ni nadie de la dirección conservadora quiere hacerse la foto con ella.

En el Partido Popular no quieren a Sonia Castedo como alcaldesa de Alicante. Dentro del PP de la Comunidad Valenciana consideran que se ha convertido en "un lastre" para ellos. Y aunque en la sede nacional dicen que ahora no toca hablar de candidaturas, tienen claro que no va a ser su cartel electoral para las próximas municipales en 2015.

En la cúpula conservadora admiten que para ellos es "un problema". Cuentan que hace varios meses se le dio a Alberto Fabra, presidente de la Generalitat valenciana, orden de actuar contra todos los imputados. "Más vale dignidad que alcaldía", fue el mensaje que se le transmitió desde Madrid . Pero le ven "incapaz" de hacerlo y resaltan que no tiene ninguna fuerza porque su propio futuro es una incógnita.

Muchos dirigentes del PP preferirían que ella dejara el cargo a tener que expulsarla. Se ha hablado de cuál es el momento adecuado para forzar su salida pero es difícil porque continúa proclamando su inocencia y se aferra al puesto. Por eso, en el PP nacional, auguran que si sigue cuando se vayan a conformar las listas, simplemente a ella no la pondrán.

Además, también comentan que Castedo ha amenazado con formar otro partido y llevarse consigo los votos del PP. Algunos cargos temen esta candidatura independiente. Aseguran que ella es "muy populista" y recuerdan casos como el de Jesús Gil, donde los ciudadanos apoyan más a la persona que a unas siglas.

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Sin embargo, desde dentro del PP, hay quien le anima a dar el paso convencidos de que no le va a funcionar. Piensan que eso podría haberle servido hace un año pero que ahora es muy difícil porque ya no tiene ese aval. La ven "demasiado tocada" y destacan que se acumulan movilizaciones en su contra en las que se pide su dimisión.

Ahora mismo los populares no quieren hacerse la foto con ella. El núcleo duro del PP evita asistir a los actos en la Comunidad Valenciana para que no les pregunten ni por Castedo ni por Fabra. En el Partido Popular muchos sostienen que él tampoco será candidato a la Generalitat porque no le quieren los suyos y porque ha hecho un discurso muy reivindicativo, en el que exigía más dinero al Estado, que iba contra Rajoy.

El presidente del Gobierno tampoco quiere imágenes con Castedo porque, según admiten sus colaboradores, es una situación "muy incómoda". Los que rodean a Mariano Rajoy recuerdan la experiencia con Francisco Camps en el pasado y opinan que ahora que el Ejecutivo presume de regeneración democrática y transparencia, lo que menos les conviene es una imagen con la regidora alicantina. A nadie se le olvida cómo Rajoy la esquivaba en junio de 2013, coincidiendo con la inauguración del AVE a Alicante y no se les pasa por la cabeza verles juntos en un mitin. El pasado sábado se vio un ejemplo muy claro cuando la salida de la Volvo Ocean Race no acudió nadie del Gobierno central ni de la Casa del Rey.

Castedo está imputada en el 'caso Brugal' y ahora también en el 'caso Rabassa', que es una pieza separada de éste. En el primer sumario se le atribuyen los presuntos delitos de revelación de información privilegiada, cohecho y tráfico de influencias en las supuestas ilegalidades en el diseño del Plan General de Ordenación Urbana de Alicante a favor de Enrique Ortiz. En la segunda investigación judicial, también aparece el mismo constructor a quien presumiblemente ella habría beneficiado a la hora de tramitar el Plan Rabassa, una macro urbanización.

Para el PP este otro escándalo de corrupción es la gota que colma el vaso y creen que Castedo les hace "mucho daño". "Es muy difícil defender algo indefendible. No se puede dignificar la política con este tipo de situaciones", resaltan. Además en las filas populares ya no solo molestan las conversaciones que han salido de la regidora con Ortiz o sus fiestas de pijamas, también les disgusta su actitud que califican de "prepotente, chulesca e intolerable". Como por ejemplo, su último ataque a una edil socialista en un pleno. "Manolete, Manolete, si no sabes torear, 'pá' que te metes", fue su respuesta ante las críticas que le hacían.

En Génova aseguran que ni su propio Grupo Municipal la apoya ya como antes porque ven los comicios a la vuelta de la esquina y la situación les parece insostenible. Por eso les gustaría que se tomara una decisión y ponerse a trabajar con el relevo. Entre los nombres que se barajan para encabezar la lista está el de la consellera de Bienestar social, Asunción Sánchez Zaplana. Pero también se habla del presidente provincial, José Císcar, de la diputada nacional, Macarena Montesinos y de Carlos Mazón, director de la Cámara de Comercio de Alicante.