Prisión para los 18 de los detenidos en Sevilla por robos en viviendas
A esta banda se les atribuyen 12 robos en domicilios sólo en Sevilla
Utilizaban técnicas especiales de copiado de llave y actuaba en las horas centrales del día, cuando los vecinos suelen estar haciendo la compra, aunque no era violento y huía en caso de ser descubierto, según los responsables policiales. La puerta blindada solía quedar intacta y los vecinos "ni se enteraban" del robo, ya que actuaban con gran rapidez.
El juez de guardia de Sevilla ha decretado prisión para los 18 de los 19 detenidos como presuntos integrantes de una red internacional especializada en robar pisos cuyas llaves copiaban con las técnicas de "bumping" e "impresioning", que no dejan rastro ni fuerzan las cerraduras.
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Fuentes judiciales han informado a Efe de que los detenidos han declarado a lo largo del día ante el juez de instrucción 9 de Sevilla, que ha decretado prisión para todos ellos por presuntos delitos de robo y pertenencia a banda armada.
En la operación fueron detenidos 24 georgianos, un griego y un armenio y se incautaron 300 piezas de joyería, numerosos útiles de cerrajería, una máquina para copiar llaves y documentación falsa.
De los 26 detenidos, 19 lo fueron en Sevilla y la Fiscalía pidió para todos ellos prisión incondicional, según las fuentes, mientras que los restantes siete fueron arrestados en Madrid.
El grupo, cuyos integrantes han sido puestos a disposición judicial, fue desarticulado dentro del Plan Nómada contra la delincuencia itinerante.
El jefe superior de Policía en Andalucía Occidental, Francisco Perea Bartolomé, ha explicado en rueda de prensa que los delincuentes utilizaban las técnicas del "bumping", que fuerza la introducción de una llave maestra en la cerradura para copiar su engranaje interno, y de "impresioning", que obtiene una copia de la llave legítima a partir de unas pletinas metálicas moldeables.
Los acusados actuaban de forma itinerante por toda España y en Sevilla se les han atribuido 12 robos en domicilios, han precisado los responsables policiales de la operación.
Según la Policía, los ladrones buscaban sobre todo dinero en efectivo y joyas, de ahí que utilizasen un detector de oro para descartar las alhajas de menos valor.
Tras un proceso de observación, el grupo seleccionaba las viviendas en cuya cerradura estuviese especializado y actuaba en las horas centrales del día, cuando los vecinos suelen estar haciendo la compra, aunque no era violento y huía en caso de ser descubierto, según los responsables policiales.
Al utilizar estas técnicas especiales de copiado de llaves, la puerta blindada solía quedar intacta y los vecinos "ni se enteraban" del robo, ha dicho el jefe superior de Policía al destacar la rapidez con la que actuaban los ladrones.
Perea ha aprovechado para recordar las medidas de seguridad que la Policía emite todos los años, como no comentar en las redes sociales la salida de vacaciones, cerrar siempre las puertas y ventanas con llave y denunciar cuando se detecte a personas sospechosas merodeando cerca de los bloques.
Algunos de los jefes de la banda tenían su residencia en el extranjero y los ladrones estaban muy especializados y se repartían las tareas de cerrajería, conductores y tratantes de joyas, según la Policía.
