Seguriber pierde la memoria

Según los abogados, los empleados de Seguriber sufren la enfermedad de la desmemoria, ya que nadie se acuerda de lo sucedido aquella noche

Tan solo uno de los 3 trabajadores de Seguriber citados por el juez ha acudido a declarar. Los otros estaban enfermos o tenían problemas familiares.

El caso es que Carlos García Somolinos, vigilante de seguridad, ahora fuera de la empresa estuvo durante todo el concierto al lado de una de las puertas de la polémica. Ahora, un año después no recuerda nada.

Por no recordar no sabe ni las conversaciones que mantuvo esa noche con sus jefes, vía walkie-talkie, ni si vio una estampida de gente, ni quien abría las puertas.

Tanta desmemoria junta ha provocado el enfado del juez y que el propio magistrado le recrimine por su pérdida de memoria. Luego ha llegado la ironía de los abogados de las acusaciones

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Este vigilante custodió la noche de la tragedia una de las puertas situadas en la cota 5 del pabellón, en la primera planta. Según su testimonio, su puesto era estático y se limitó a estar ahí toda la noche.

Hasta el momento, todos los trabajadores de Seguriber que han sido interrogados sufren una pérdida de memoria de tal nivel que sería difícil que lograran superar las pruebas para convertirse en vigilantes de seguridad privada.