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Caso Fabra

Pons: "Carlos Fabra era muy importante y tenía acceso directo a los ministros"

El dirigente del PP ha comparecido por videoconferencia en calidad de testigo en el juicio contra Carlos Fabra

La sexta sesión del juicio contra el expresidente popular de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, se ha iniciado hoy en la Audiencia Provincial con las declaraciones por videoconferencia de Esteban González Pons, Juan Costa y Rubén Moreno. El vicesecretario de Estudios y Programas del PP ha negado que Fabra le pidiera algún favor porque no necesitaba dirigirse a él, ya que Fabra era muy importante y tenía acceso directo a los ministerios. / ATLAS

Castellón

El vicesecretario de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons, ha negado este miércoles en su declaración como testigo en el juicio a Carlos Fabra que el exdirigente del PP pidiera su mediación para autorizar los fitosanitarios que acabaría comercializando. Fabra no lo necesitaba, porque según González Pons, en aquella época era "muy importante en el PP" y tenía "acceso directo a los ministros". Por su parte, un extrabajador de Hacienda ha declarado que Fabra se negó a colaborar y no justificó ingresos en las cuentas investigadas.

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El último en declarar en la sexta sesión del juicio a Carlos Fabra ha sido Esteban González Pons. Comparecía por videoconferencia y lo hacía como testigo, ya que cuando se iniciaron las supuestas gestiones de Fabra para agilizar las licencias de los fitosanitarios de Naranjax, González Pons era portavoz del grupo popular en el Senado. Dice que Fabra nunca le pidió ningún favor para Naranjax, empresa de la que el expresidente de la Diputación supuestamente cobraba comisiones millonarias.

González Pons aseguraba que el exlíder "era una persona muy importante en el PP" y, por tanto, si necesitaba algo tenía hilo directo con los ministerios. No obstante, ha dicho que no le habría extrañado que pidiera su mediación porque, según dice, es normal que los dirigentes políticos intenten "beneficiar a las empresas de sus regiones".

También comparecía el exministro y exsecretario de Estado de Hacienda, Juan Costa, quien estuvo en la reunión de 1999 con Fabra y el entonces ministro de Agricultura, Jesús Posada, en la que se abordó el retraso en las autorizaciones de los fitosanitarios de Naranjax. Sin embargo, sufría un fallo de memoria, habitual ya en los testigos de este juicio y aseguraba no acordarse del tema ni de los asistentes a aquella reunión.

Un encuentro en el que también estuvo el senador del PP por Castellón, Juan José Ortiz, el único miembro del partido que testificaba in situ en la Audiencia Provincial. Su declaración exculpa a Carlos Fabra, ya que asegura que en la reunión el único que se interesó por los fitosanitarios de Naranjax fue el entonces senador Miguel Prim, que también está acusado por tráfico de influencias.

Por otra parte, admitía haber hecho gestiones para informarse sobre los retrasos en las autorizaciones a Naranjax, aunque "sin recibir nada a cambio", como puntualizaba hasta en dos ocasiones. A pesar de que comparecía como testigo, Ortiz se veía acorralado cuando la fiscal cuestionaba su interés por la empresa de Vicente Vilar. Le preguntaba porqué pidió información acerca de un expediente administrativo del que no era parte interesada, a lo que Ortiz respondía que "un parlamentario también tiene derecho a obtener información, y no es privilegiada".

No hubo "explicación razonable" de ingresos en las cuentas de Fabra

Otro de los testigos del día era un exinspector regional de la Agencia Tributaria. Llamado a declarar por la defensa de Fabra, pero su testimonio no dejaba en buen lugar al expresidente de la Diputación. Decía que cuando investigaron a Fabra por irregularidades fiscales, éste no colaboró en el proceso de inspección y que hubo datos sobre los movimientos bancarios a los que no tuvieron acceso. Preguntado por los 146 ingresos no justificados en las cuentas de Fabra, el inspector aseguraba que el exlíder del PP "no aportó ninguna explicación razonable sobre estas operaciones".

Los escoltas no vieron maletines

Dos de los escoltas que Carlos Fabra tenía cuando era presidente de la Diputación testificaban también en el juicio. Ambos son agentes de la Policía Local y se encargaban de la seguridad del exlíder popular "desde que salía de casa y hasta que volvía". Reconocen haber ido con él a la fábrica de Naranjax, pero no vieron que recibiera ningún maletín o bolsa de plástico con dinero por parte del empresario Vicente Vilar. No obstante, explicaban que ellos se quedaban fuera de la fábrica, por lo que admiten no saber lo que pasaba dentro.

El juicio a Carlos Fabra se retomará el próximo martes con la declaración de los peritos de Hacienda.

 
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