Más de un centenar de intoxicaciones etílicas en tres días de feria
Un joven increpa a un policía que intenta disuadir a los jóvenes concentrados en un botellón(CADENA SER)
Las urgencias de los hospitales de Málaga han atendido, sobre todo, a adolescentes. Hay más chicas y muchas presentan heridas por los golpes al desmayarse por el consumo de alcohol
La cifra la conocemos en pleno debate sobre el control policial y las quejas por el botellón tanto en el Centro Histórico de la Ciudad como en el real de Cortijo de Torres. Se trata del primer balance oficial que realizan los responsables sanitarios tras los primeros días de fiesta.
Las estadísticas confirman que, en la mayoría de los casos, se trata de adolescentes con edades comprendidas entre los 16 y 18 años.
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Los sanitarias han notado un repunte en el número de atenciones y advierten que casi el 90 por ciento de los casos son chicas; muchas de ellas llegan al centro sanitario con lesiones por los golpes que se dan al desmayarse y caer al suelo. Se trata de traumatismos que obligan a los médicos a llevar a cabo scanner para comprobar que la víctima no presenta mayores heridas internas.
Las cifras más elevadas se registraron el pasado lunes, primer día laborable de feria. Durante apenas unas por la tarde, los Servicios de Emergencia (Cruz Roja y 061) atendieron cerca de medio centenar de comas etílicos en el Centro Histórico de Málaga.
Los problemas de consumo de alcohol obligaron incluso al Ayuntamiento de Málaga ha decretar el cierre de una caseta en el real de Cortijo de Torres tras detectar que vendía alcohol a menores de edad.
El asunto se ha topado, de lleno, con las quejas de los vecinos del centro así como de los bares por la falta de control y de vigilancia tras el toque de queda fijado a las seis de la tarde. En los primeros días, el botellón de los jóvenes ha continuado hasta primeras horas de la noche.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha advertido que si es necesario se planteará un mayor control policial, incluso sancionar a quienes consuman alcohol en la calle. La policía, en algunas calles, se ha tenido que enfrentar a grupos de jóvenes (como se puede ver en la fotografía) en un intento de disuadirles para que dejen de consumir alcohol.
