La menor en estado crítico tras la macrofiesta de Halloween sufre serios problemas cerebrales
Belén, de 17 años, está conectada a una máquina de respiración artificial
Un grupo de jóvenes, en la entrada del tanatorio de Daganzo, donde han acudido a despedir a Katia Esteban Casielles, de 18 años, una de las tres fallecidas en el recinto de Madrid Aren(EFE/ Fernando Villar)
Belén, la joven de 17 años, cuyo estado de salud preocupa más tras ser arrollada durante una fiesta de Halloween en el recinto deportivo Madrid Arena de la Casa de Campo, está ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Doce de Octubre de Madrid. Su estado es crítico y sufre serios problemas cerebrales por el tiempo que pasó en parada respiratoria. La menor de edad está conectada a una máquina de respiración artificial.
La otra chica que está hospitalizada, María Teresa Alonso Vinateo, tiene 20 años y está grave en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid pero no se teme por su vida.
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La estampida, cuyas causas se investigan, causó la muerte de tres jóvenes de 18 años. Todas han sido incineradas este viernes.
Cristina Arce de la Fuente, nacida el 13 de marzo de 1994, ha sido incinerada en el crematorio del cementerio de la Almudena. Su familia y amigos le han velado durante la noche en el tanatorio de la M-30.
Katia Esteban Casielles, que había cumplido la mayoría de edad el pasado 4 de octubre, ha sido incinerada en el cementerio de La Paz de Tres Cantos (Madrid). Su madre falleció hace dos años de un cáncer y era hija de un ex concejal de Daganzo.
A la tercera víctima mortal, Rocío Oña Pineda, nacida el 14 de julio de 1994, ha sido incinerada esta tarde en el Tanatorio La Paz de Alcobendas.
Este viernes es día de luto oficial en la capital madrileña en solidaridad con las víctimas.
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