Estafa con coches de alquiler
Alquilaban coches y los vendían como vehículos de segunda mano. La policía ha detenido a 6 implicados en el caso que consiguieron "colocar" hasta 63 vehículos. Los expertos calculan que el valor de la estafa asciende a un millón de euros
La Guardia Civil recuperó uno de los coches en el puerto de Barcelona cuando estaba a punto de ser embarcado hacia Marruecos. A partir de esta información, montaron una investigación conjunta con los Mossos d'Esquadra, que ha acabado ahora con la detención de 6 personas
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Empresas de alquiler de coches como Hertz, Pepe Cars o Globalia, la mayoría ubicadas en el aeropuerto de Barcelona, ??habían perdido de vista una importante flota de hasta 63 vehículos. La red estaba liderada por un hombre francés de 32 años afincado en el municipio barcelonés de Sant Pere de Ribes, que, sin tener un trabajo conocido, llevaba un alto nivel de vida. Según la investigación, con la colaboración de 5 personas más, todas con antecedentes, se dedicaba a alquilar los coches por teléfono o por internet con documentación falsificada. Empezaron con algunos coches, pocos, y como el negocio funcionaba, llegaron a montar dos empresas ficticias y a enviar un grupo de 17 vehículos a una empresa belga de segunda mano.
Además, para que los inquilinos no sospecharan, y para evitar dejar rastro, ofrecieron trabajo a varios conductores con engaños varios como este que detalla Pedro Barcons, jefe de la Unidad Central de Tráfico ilícito de Vehículos de los Mossos: "poco antes de la campaña electoral de las Generales, les dijeron que recogieran los coches de alquiler y los aparcan en la empresa. Que rotularían los coches con el nombre de varios partidos políticos y circularían por las ciudades haciendo propaganda. Los aparcaron en la sede de la empresa y el día que fueron a trabajar, ya no había empresa, ni vehículos ". Eran 12 conductores y cada uno tenía el encargo de ir a buscar dos.
Una vez la red conseguía los coches, buscaban un vehículo idéntico, le copiaban la placa de matrícula, falsificaban la documentación y lo vendían por internet como un vehículo propio. En las remesas de coches que enviaron a Francia o Bélgica no se esforzaron ni en cambiar las placas de matrícula. Los investigadores calculan que el valor en el mercado de los 63 vehículos robados es de más de un millón de euros. Han podido recuperar 51.
