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Cinco euros por pedir un taxi a domicilio

Suben las tarifas un 1,63% de media desde este lunes. La medida más polémica, 5 euros fijos por pedir un taxi a domicilio, todavía no ha entrado en vigor

El Ayuntamiento está trabajando ya en esta bajada de bandera de 5 euros para el servicio de taxi a domicilio, vía centralita. Se trata, dicen las empresas del sector, las que propusieron la medida en la última reunión del Consorcio, de clarificar este servicio de cara al usuario. "Es establecer una bajada de bandera específica para el servicio de radioteléfono, pero requiere de una modificación de la ordenanza que regula el funcionamiento del sector", explica Mariano Sánchez, Presidente de la Federación Profesional del Taxi. En el Área de Medio Ambiente confirman que su intención es sacar adelante la medida, aunque todavía no tienen un calendario.

Este precio fijo de 5 euros por pedir un taxi a domicilio divide a los sindicatos mayoritarios. En UGT creen que se trata de una garantía para el usuario que hasta ahora, y hasta que se apruebe la modificación, puede encontrarse con cualquier cantidad cuando el taxi llega a su casa - cantidad resultante de la bajada de bandera de la tarifa diurna o nocturna sumada al desplazamiento desde el lugar en el que está el taxi en el momento de la llamada hasta el domicilio del cliente -. Sin embargo, en Comisiones Obreras creen que este precio fijo es superior al que, en muchos casos, se venía pagando por este servicio y que el resultado va a ser un efecto disuasorio, es decir, una disminución en el número de usuarios que optan por el taxi a domicilio.

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En cuanto a la subida tarifaria efectiva desde hoy (5 céntimos la bajada de bandera diurna, 5 céntimos el suplemento de llegada a estación y recinto ferial y un euro la hora de servicio tanto de día como de noche) tampoco se ponen de acuerdo en las centrales. UGT cree que el incremento es moderado y equilibrado, teniendo en cuenta la subida del IPC sectorial. Comisiones Obreras apuesta por una reestructuración general del sector para su supervivencia que no puede limitarse a la vía tarifaria.

En cualquier caso, la suerte va a tener un papel importante los próximos quince días para los madrileños que utilicen el taxi para sus desplazamientos, porque las nuevas tarifas obligan a una actualización de los taxímetros que todavía no se ha hecho efectiva en todos los vehículos. El proceso se puede alargar durante dos semanas, en las que convivirán, en las calles de la capital, taxis con tarifas un 1,6 por ciento más caras de media que las de otros.

 
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