120 curas de Madrid censuran el coste de la visita del Papa
Bajo el título "Los Mecenas de Rouco", más de un centenar de sacerdotes critican en un documento público la alianza entre la Iglesia y el poder económico y político para financiar la Jornada Mundial de la Juventud
Denuncian el "escándalo social" que supone el alto coste de la visita en un contexto de crisis económica y lamentan que no se haya tenido en cuenta a la Iglesia de base y a las parroquias para una cita basada en el "boato" y alejada de la humildad y la sencillez del mensaje cristiano
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Constituidos en el denominado Foro de Curas de Madrid, son 120 sacerdotes de otras tantas parroquias madrileñas que han querido expresar una voz crítica dentro de la propia Iglesia. No se oponen a la visita del Papa ni a la Jornada Mundial de la Juventud, que tendrá lugar en la capital la tercera semana de agosto, pero sí al modo en que la jerarquía eclesiástica está promoviendo y financiando esa cita.
En un documento titulado "Los Mecenas de Rouco", el Foro censura la alianza entre el cardenal de Madrid y las grandes empresas del IBEX 35 que, a través de la Fundación Madrid Vivo colaboran en la Jornada Mundial de la Juventud. "Ese pacto con las fuerzas económicas y políticas refuerza la imagen de la Iglesia como institución privilegiada y cercana al poder, con el escándalo social que ello supone, particularmente en las circunstancias actuales", señala el documento.
Los firmantes, que han remitido este documento al cardenal Rouco, censuran el alto coste de la Jornada, cifrado en 50 millones de euros y acusan a la Iglesia de aliarse con el poder económico responsable en buena medida de la crisis, mediante el patrocinio de grandes empresas que obtienen grandes beneficios fiscales a cambio de esa colaboración. El documento considera que, planteada de este modo, la cita se aleja de la humildad y sencillez del mensaje de Jesús.
Los integrantes del Foro de Curas de Madrid lamentan también que no se haya tenido en cuenta a la Iglesia de base y a las parroquias madrileñas de cara a esta visita, salvo para cuestiones prácticas de alojamiento y cesión de aseos y duchas. Por todo ello, reivindican su derecho a ser escuchados porque, según dicen, la opinión de la Jerarquía no es la única en la Iglesia madrileña ni representa el sentir de todos los cristianos.
