Alejandrina Candela, la fundadora de la Horchatería Azul, da nombre al Centro de Formación "Impulsalicante"
El Ayuntamiento instalará una placa con el nombre de la mujer para reconocer la figura de esta vecina trabajadora, que consiguió sacar adelante el negocio familiar con una horchatería que está cerca de alcanzar el centenario
Alicante
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Alicante ha acordado otorgar al Centro de Formación de la Agencia Local de Desarrollo, Económico y Social "Impulsalicante" el nombre de Alejandrina Candela, fundadora junto a su marido Manuel Sorribes de la emblemática Horchatería Azul (situada en la calle Calderón de la Barca, en las inmediaciones de la Plaza de Toros).
Según el Ayuntamiento, se instalará una placa con el nombre de la mujer en el Centro de Formación para reconocer "la figura de esta vecina humilde y trabajadora que consiguió sacar adelante el negocio familiar con una horchatería que ya está cerca de alcanzar el centenario".
Más información
Fue el alcalde, Luis Barcala, quien visitó hace unos días a las nietas de Alejandrina Candela en la Horchatería Azul para hacerlas partícipe de la propuesta y recibir su aprobación.
La concejala de Empleo y Fomento, Mari Carmen de España, ha recordado que la Agencia Local tenía como objetivo encontrar un "nombre para el Centro de Formación que estuviera íntimamente relacionado con la misión de la institución, que no es otra que el desarrollo socio - económico del municipio". Finalmente, aquello que representa Alejandrina y la Horchatería Azul para Alicante parece haber sido la opción perfecta para promover el desarrollo del comercio local.
La historia de Alejandrina Candela y la Horchatería Azul
Alejandrina Candela, fundadora junto a su marido, D. Manuel Sorribes de la que sería conocida como la Horchatería Azul en 1930, fue un ejemplo de mujer humilde y trabajadora que consiguió sacar adelante el negocio familiar, una empresa que está cerca de alcanzar la cifra del centenario.
Se casó a la temprana edad de 18 años y se trasladó a vivir a la casa familiar de su marido, situada sobre la fábrica de corcho que regentaban y que acabaría convirtiéndose en la Horchatería Azul.
Allí trabajó fabricando objetos de corcho, entre ellos heladeras para granizados. La familia obtuvo entonces una patente para elaborar jarabe de horchata, que vendían a la hostelería.
La Guerra Civil trajo consigo la dificultad para encontrar materias primas y a esto se unió el fallecimiento de los suegros de Alejandrina y la enfermedad de su marido, que lo incapacitó para trabajar. La fábrica cerró y Candela se vio sola con tres hijos a los que alimentar.
Durante la guerra, no dudaba en ir sola a las fincas que tenían algunos familiares fuera de Alicante y allí cargaba sacos de arroz o de lo que pudieran darle y se los llevaba a Alicante en trenes de mercancías. Entonces se le ocurrió la idea de transformar el local familiar en una horchatería, aprovechando la patente que tenían. Así nacía la Horchatería Azul.
Su hijo Manuel y su nuera María Tafalla fueron los artífices de la consolidación de la Horchatería Azul como negocio. Cogieron el relevo de su gestión y trabajaron duramente hasta conseguir que la empresa llegase hasta hoy, asegurando incluso el relevo generacional con un bisnieto. Alejandrina se jubiló a los 65 años, pero siguió ayudando cada día hasta pasados los 80. Finalmente, falleció a los 99 años, rodeada de los suyos.
Actualmente están al frente de la Horchatería Azul sus nietas Inmaculada y Mari Ángeles y ya han trabajado allí algunos de sus 14 bisnietos. Un negocio que es ya parte de la historia de Alicante y que, como la propia Alejandrina Candela, ha dejado huella en todos sus descendientes.