Alicante

La Plataforma por el TRAM a Sant Joan-Mutxamel califica la polémica con los trolebuses como "una cortina de humo para ocultar la parálisis", afirman, en la construcción de tramos del tranvía consensuados con el anterior Consell.

Dicen estar hartos de esperar para conocer el estado del proyecto y acudirán el próximo lunes al Sindic de Greuges.

Recuerdan que ya el pasado mes de septiembre el Síndic resolvió que tenían derecho a ver el proyecto en el que está trabajando la Conselleria, pero ni entonces ni hasta ahora ésta ha querido atenderlos.

"Este ninguneo, junto con la ausencia de partida en los últimos presupuestos, es lo que más les preocupa", dice su portavoz, Antonio García.

El cronograma del anterior Consell contemplaba la llegada del TRAM a Mutxamel en 2027. En una primera fase hasta Benimagrell, y una segunda hasta Mutxamel, y partidas anuales para continuar con el proyecto, como los 4 millones y medio para 2023.

Recuerdan que se han invertido ya 800.000 euros en la redacción y que la mayoría de las alegaciones, de los alcaldes populares de Alicante y Sant Joan, fueron atendidas.

Mientras, la Conselleria de Infraestructuras y Territorio insiste: están tratando de consensuar la expansión del TRAM en Alicante y su área metropolitana.

Fuentes de la Conselleria señalan que "están analizando con el Ayuntamiento los detalles de trazados, incluso cuál es la mejor alternativa de material rodante".

Añaden estas fuentes que en ningún caso se habla de trolebús, para añadir que "hay muchas alternativas modernas y de última generación que son tranvías más adaptados a las ciudades y que son eléctricos". Y afina algo más: sistemas más modernos que no requerirán catenaria.

La oposición pide al Ayuntamiento claridad sobre el proyecto

Mientras, la oposición en el Ayuntamiento ahonda en la herida.

Exige al equipo de Barcala y a la Generalitat que confirmen que la ampliación del TRAM por San Gabriel será una realidad.

Quieren saber el motivo "real" por el que se ha retrasado la remodelación de las tres avenidas (Eusebio Sempere, Loring y Óscar Esplá) que debían adecuarse para dar cabida al TRAM, y cuya financiación de la Diputación se ha destinado ahora a la remodelación de los antiguos cines ABA 6. Lo explican Trini Amorós, del PSOE, Sara Llobell, de Compromís, y Manolo Copé de EU-Podem.