El Palau de la Música volverá a hacer obras sin cerrar para estar "niquelado" en 2027

València

La idea es dejar el Palau de la Música "niquelado" para 2027. Así lo ha dicho su director Vicente Llimerá, que ha presentado hoy el plan de obras que se van a acometer durante los próximos años en los diferentes espacios del Palau para subsanar las deficiencias que han encontrado tras la reapertura. Son obras, sobre todo, destinadas a acabar con las goteras y las filtraciones de agua que inundan diferentes partes del auditorio cuando llueve, aunque solo sean lluvias de 15 minutos, ha asegurado Llimerá, que dice que las obras para hacer frente a las filtraciones costarán 1,5 millones de euros.

En total, todos los trabajos costarán 6,4 millones de euros en total, y las obras, asegura Llimerá, habrían sido más baratas si se hubieran hecho junto con la reestructuración de los techos que se cayeron y mantuvieron el Palau cerrado durante cuatro años.

Porque ahora es más complicado reabrir zonas ya selladas y redactar nuevos proyectos de obra. Dice Llimerá que las deficiencias, que se han detectado en una auditoría, se conocían, que mantenimiento y la empresa adjudicataria empezaron a registrarlas como tarde en 2022 y que el anterior gobierno municipal era conocedor.

Ahora, se llevarán a cabo las actuaciones sin cerrar el Palau y sin que afecten a la programación. Sobre todo, se harán en verano, cuando no hay conciertos programados, y terminarán previsiblemente en 2027. Dice Llimerá que espera que el público sepa que las obras durarán un tiempo pero no eternamente aunque afectan a muchos elementos:

Filtraciones, estanqueidad de los fosos, cambios de baños

El problema básico son las filtraciones de agua, que no solo afectan al vestíbulo y a zonas como el archivo, sino también al vestíbulo de entrada del personal donde Llimerá, en tres ocasiones desde agosto, asegura haber tenido que achicar agua, que si no llega a las salas de ensayo.

Además de destinar 1,5 millones de euros a filtraciones, se van a impermeabilizar las cubiertas de cobre del edificio. Además, se va a mejorar la estanqueidad del foso y de los ascensores, a cambiar los baños, a articular un sistema de gestión integral del edificio y a mejorar el aislamiento acústico de la Sala Iturbi, entre otras cosas. Además, se cambiará la piedra de las barras de la cafetería o los acabados del vestíbulo.