El Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia analizará los sistemas antiincendios de más de un centenar de rascacielos

València

El Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia va a realizar un estudio sobre edificios de gran altura para analizar asuntos como la accesibilidad de sus vehículos de autobombas y autoescalas para la extinción y el rescate en caso de incendio u otras emergencias. El proyecto está en su fase inicial, pero contempla analizar más de un centenar de rascacielos de la provincia.

No es la primera vez que se hace un estudio similar, aunque en ocasiones anteriores se habían estudiado edificios de más de nueve alturas, y ahora serán de más de 15. Una iniciativa que pretende salvar vidas, que se comenzó a urdir antes del incendio en el barrio de Campanar de València, en dos torres de edificios, en el que perdieron la vida diez personas hace mes y medio, pero que a raíz de esa tragedia se va a ampliar con más aspectos a analizar durante las extinciones.

Un incendio arrasa un edificio con 138 viviendas en el barrio de Campanar, en València

¿En qué va a consistir ese estudio del Consorcio Provincial de Bomberos que desarrolla en colaboración con el Colegio de Administradores de Fincas de Valencia?

Pues, aunque el proyecto está en su fase inicial, la idea es estudiar las características de 116 edificios de 15 o más alturas -el más alto tiene 29 plantas- ubicados en distintos municipios de la provincia, ninguno en València capital, donde no tiene competencia el Consorcio, pero sí en Mislata, Paterna, Burjassot y varias localidades de costa, como Cullera, Gandia, Sueca, Pobla de Farnals o El Puig de Santa Maria, entre otros.

Entre otras cosas, se identificarán y documentarán aquellos edificios que dispongan de "columna seca", que es como se conoce a un dispositivo de uso exclusivo para los bomberos en caso de incendio, y si se encuentran en condiciones de operación.

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También se analizarán las condiciones de acceso al edificio para los bomberos y sus vehículos, especialmente los de altura. Esto ayudará a los bomberos a conocer el escenario en el que van a trabajar en caso de emergencia. De hecho, los datos serán digitalizados de manera que podrán consultarse en una tablet.

Hay que recordar que los incendios en este tipo de edificios precisan de actuaciones muy complejas de los bomberos para su extinción. Primero por la accesibilidad. Y es que normalmente existen zonas ajardinadas que retranquean el edificio respecto a la línea de calzada y que dificultan el emplazamiento de los vehículos de bomberos. Es algo con lo que se encontraron también los bomberos de València en el incendio de Campanar.

Además, existe un elevado riesgo de propagación vertical del incendio, por huecos de ascensores o las escaleras, debido al efecto chimenea. También por fallos en la compartimentación del edificio. Por último, el rescate en estas intervenciones no resulta nada sencillo, debido al alto índice de ocupación que suelen presentar estos edificios y por tanto de víctimas potenciales.