Un desacuerdo entre juzgados mantiene indefenso a un profesor de instituto víctima de una agresión LGTBIfóbica por parte de sus alumnos en 2022

Valencia

Miquel Álvarez, el profesor agredido, se siente totalmente indefenso. En febrero de 2022 un grupo de alumnos y alumnas salieron al patio del centro, el instituto Les Alfàbegues de Bétera, con una bandera LGTBI. La dirección del centro entendió que el patio no era lugar para realizar reivindicaciones de ningún tipo.

La bandera arcoíris se retiró sin más. Al día siguiente, y como gesto de protesta y respuesta, otro grupo de alumnos enarboló banderas de España en el patio del centro para contraponer la bandera nacional con la bandera LGTBI. La dirección lo interpretó como una provocación y entonces sí retiró las banderas. Esa retirada fue la que envalentonó a los alumnos reprendidos que rodearon a Miquel le insultaron y agredieron por su condición.

La dirección del centro, que incluso amagó con dimitir, se puso del lado del docente agredido y la conselleria (entonces en manos del Botànic) le indicó que debía denunciar y que cuando se admitiera a trámite la denuncia correrían con su asistencia legal. Han pasado 21 meses y los dos juzgados siguen enviándose el expediente que incluso llegaron a archivar por error. Miquel está harto.

Desde CCOO del País Valencià, Xelo Valls, secretaria general de la Federación de Educación, aún da un paso más. Cuando tanto se habla de reforzar la autoridad del profesorado no es de recibo casos así que solo envalentonan a los agresores (aquellos diez alumnos fueron expulsados) y desaniman a otros docentes que puedan estar sufriendo situaciones parecidas más allá del componente ultra de aquella agresión.