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El alumnado con menos recursos tiene dos veces más posibilidades de repetir curso, según Save the Children

Existe una brecha importante en cuestión de género: a igual competencias en ciencias y en matemáticas, los niños repiten dos veces más que las niñas

Niños y niñas de los programas de refuerzo educativo de Save the Children / Pablo Martí – Diodo Media

Niños y niñas de los programas de refuerzo educativo de Save the Children

Valencia

La repetición de curso en la Comunitat Valenciana es socialmente injusta: a igual rendimiento, el alumnado con menos recursos tiene dos veces más posibilidades de repetir curso que aquel con un mayor nivel socioeconómico. Así lo asegura Save the Children, que ha realizado un análisis del informe PISA difundido por la OCDE desde una perspectiva de la equidad educativa.

Otro aspecto que influye en la repetición de curso es la vulnerabilidad que presentan los niños y niñas de origen migrante (o nacidos en la Comunitat Valenciana con padres y madres extranjeros). Las probabilidades de que repitan curso son también el doble que las del resto del alumnado.

En lo que respecta al género, también existe una brecha importante: a igual competencias en ciencias y en matemáticas los niños repiten dos veces más que las niñas.

“Los datos que arroja el informe lo dejan claro: la repetición de curso, a pesar de ser una práctica asentada en nuestro país, parece no cumplir el objetivo de ayudar a los alumnos con más dificultades a llegar a su nivel, sino que puede contribuir a la desvinculación escolar y que el niño se aleje emocional y cognitivamente del sistema educativo”, asegura Rodrigo Hernández, director de Save the Children en la Comunitat Valenciana.

El informe también muestra la exposición al bullying dentro del centro educativo. En la Comunitat Valenciana el 5,9 % del alumnado se considera acosado con frecuencia en este entorno.

Más allá del informe PISA

Si se analizan otros aspectos educativos importantes fuera del foco del informe PISA pero relacionados con el mismo, hay que tener en cuenta la tasa de abandono escolar temprano. A pesar de que se ha reducido en los últimos años, en la Comunitat Valenciana, todavía se sitúa en el 15,7%, por lo que continúan siendo cifras preocupantes.

Además, las ayudas de comedor escolar solo alcanzan al 19,7% del alumnado en la educación infantil y obligatoria, lejos del 32,2% de niños y niñas que viven en riesgo de pobreza o exclusión social.

“Proporcionar alimentación saludable a través del comedor escolar mejora la nutrición y la salud de niños, niñas y adolescentes, y tiene un impacto directo en el rendimiento escolar del alumnado. Sin embargo, todavía un gran número de ninos y niñas en riesgo de pobreza y exclusión social debe pagar el comedor escolar o parte de él. Se trata de una situación que para muchas familias es insostenible”, afirma Hernández.

Medidas para combatir la desigualdad

Save the Children propone para mejorar la equidad educativa en la Comunitat Valenciana las siguientes medidas:

- Seguir incrementando las plazas para garantizar un acceso universal progresivo a educación infantil de 0 a 3 años de calidad, con metodologías didácticas de aprendizaje adaptadas, priorizando a los niños y niñas en situación de pobreza o exclusión social, con plazas asequibles mediante medidas de tarificación social, con un precio mínimo suficientemente bajo y que incluya comedor para familias de bajos recursos, y criterios de acceso que prioricen renta y vulnerabilidad.

- Garantizar que en la política de becas y ayudas al estudio primen los criterios de equidad, asegurando que todos los niños y niñas que se encuentran en situación de pobreza tienen cubiertos los costes de transporte, comedor, material escolar y extraescolares. Incrementar las cuantías hasta unas verdaderas becas-salario para estudiantes de Formación Profesional y Bachillerato con bajos recursos para evitar el abandono hacia el mercado laboral por falta de ingresos.

- Mantener y reforzar mecanismos para asegurar el derecho de todo niño o niña a recibir una alimentación saludable y nutritiva, ampliando el alcance de las becas-comedor para cubrir las necesidades de todos los niños y niñas en situación de vulnerabilidad. Por otro lado, resulta necesario invertir en las infraestructuras y equipamientos necesarios para ampliar la limitada red de cocinas y comedores en centros educativos.

- Reducir la segregación escolar por nivel socioeconómico y origen migrante asegurando la equivalencia en calidad y servicios en la planificación de la oferta escolar, desarrollando medidas de información, no discriminación y gratuidad en la admisión y de escolarización equilibrada.

- Continuar implementando planes de refuerzo educativo con recursos y amplitud suficientes para garantizar su eficacia y reducir el desfase educativo, especialmente entre el alumnado más vulnerable, con el objetivo de reducir la repetición.

 
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