Los científicos recuerdan en la UA que la divulgación sirve a la sociedad para tomar decisiones basadas en el conocimiento

Alicante

¿Qué tiene que ver el cosmos y el arte? ¿qué nexos de unión podemos encontrar entre el ADN y los cuadros de Picasso? A estas preguntas, entre otras, responden algunos de los profesores y científicos de centros del CSIC y de las universidades de Salamanca y de La Rioja que participan en una nueva edición del curso 'Divulgar Ciencia en el siglo XXI'. Un encuentro que, como afirma una de sus organizadoras, la catedrática de Física Aplicada, Isabel Abril, pone de relevancia que sin ciencia no hay progreso social.

Pero, además, tanto Abril, como el resto de miembros del comité científico y de los ponentes, también ha aprovechado la ocasión para reivindicar que la divulgación juegue un papel fundamental a la hora de tomar unas decisiones que deben estar basadas en el conocimiento científico. Y es que un país con una mayor cultura científica, consideran, es una sociedad mucho menos manipulable.

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Con la profesora Abril y con Carlos Pedrós-Alió, del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC hemos charlado en Hoy por Hoy Alicante sobre el papel, cada vez más asumido por los científicos, como divulgadores, algo que también les reclama la sociedad. No obstante, el profesor Pedrós-Alió lamenta que se haya incrementado de forma un tanto exagerada las exigencias que tienen que soportar los investigadores. Asume estos nuevos roles, pero cree que no pueden rozar la heroicidad o convertirse en "superpersonas" que además de cumplir con su trabajo de investigar y de divulgar también tienen que crear sus propias empresas para potenciar sus trabajos.

El investigador del CSIC tiene previsto dar una charla con este enunciado 'Arte y Ciencia: Picasso y la estructura del ADN'. Al respecto, y entre otras similitudes, asegura que tanto en la creación artística como en el mundo de la ciencia es necesario un 1 % de genialidad y un 99 % de transpiración.

Este curso sobre divulgación cuenta con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología del Ministerio de Ciencia e Innovación, de la Universidad de Alicante, del CEFIRE y de la delegación alicantina del Institut d'Estudis Catalans.

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