“Gente de Elda”, Ramón Candelas Orgilés. Médico y humanista

Elda

Ramón Candelas Orgilés es un ejemplo de que los sueños se cumplen. Falleció el 11 de julio de 2020 a la edad de 91 años. Mercedes, una de sus cinco hijas e hijos, ha hecho una semblanza sobre él en el programa Hoy por Hoy Elda Vinalopó. Con “amor de hija” ha recordado el legado de amor que ha dejado, sus muchas aficiones, las ganas que tenía de conocer y aprender sin tener en cuenta su edad. Ramón ha dejado herencia de sabiduría. Todas sus pasiones están repartidas entre sus hijos e hijas.

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Texto de Mercedes Candelas

Me habéis pedido que hiciera una semblanza sobre él para apoyar esta iniciativa, y con mucho gusto y amor de hija os voy a contar.

Antes de nada, quisiera en mi nombre y en el de toda mi familia, dar las gracias a los amigos de La Tertulia Asociación Cultural Elda Petrer por la iniciativa de solicitar poner el nombre de mi padre, Ramón Candelas Orgilés a una calle, en calidad de MÉDICO Y HUMANISTA. Fue este término precisamente, HUMANISTA, el que los hijos escogimos para titular el libro que dedicamos a nuestro padre con la recopilación de sus obras, escritos y las muchas facetas que en su vida desarrolló. Estamos realmente agradecidos y orgullosos de que haya personas que se sigan acordando de él y lo encuentren merecedor de algo tan significativo como poner su nombre a una calle de Elda.

Ramón nació en Elda, en 1929, en la calle de la Tripa, oficialmente calle Purísima, en el casco antiguo. De orígenes zapateros, de joven estuvo haciendo de viajante de chicarritos (zapatos para niños) por cuenta de la fábrica familiar. En 1948 ingresó en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid, convirtiéndose en médico radiólogo, profesión que ejerció toda su vida en Elda, en el Ambulatorio de Padre Manjón y en el Hospital General. Pero Ramón, además, era un apasionado del arte, y ya con hijos pequeños aprovechaba parte de sus vacaciones para examinarse en Valencia por libre en la Escuela de Bellas Artes, consiguiendo licenciarse en 1982, con 53 años.

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Todo lo relacionado con la medicina, el arte y la cultura eldense le interesó. Así, fue miembro fundador de la Comparsa de Piratas, para la que la familia rescató su traje original, único de la época que se conserva. Fue miembro fundador de “La casica del artista”; miembro fundador de la efímera Asociación Cultural “El Burro”; presidente de la Asociación Médico Quirúrgica de Elda; presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre de Elda; fue miembro fundador y presidente de la Asociación Fotográfica de Elda, miembro de “La Tertulia Los críticos”, médico en el instituto Azorín, docente en el colegio Sagrada Familia y en las Aulas de la Tercera Edad, y fue miembro de la Asociación Cultural “La Tertulia”. Como reconocimiento a su labor cultural, en 1993 fue nombrado pregonero de las Fiestas Mayores de Elda, honor que su esposa, hijos y nietos vivimos con especial orgullo.

De su obra artística, cabe destacar el Vía Crucis que realizó en fundición de bronce y que donó a la parroquia de San Francisco de Sales, por cuanto generaciones de eldenses han venido admirándolo y pueden hacerlo aún hoy en día. Y en su faceta literaria participó con un sinfín de escritos y artículos en las diferentes revistas eldenses (Moros y Cristianos, Fiestas Mayores y Alborada).

Ramón obtuvo numerosos reconocimientos, galardones y premios a lo largo de su vida, tanto de pintura como de escritura y fotografía, destacando el premio eldense “La Cañamona”, que le fuera otorgado en 2010 “en reconocimiento a una larga vida dedicada al estudio y divulgación de la medicina, el arte, la cultura y la historia”, el homenaje de la Cofradía de los Santos Patronos en 2016 y el homenaje y exposición de La Tertulia junto con la Asociación Fotográfica de Elda en 2021.

En su faceta como etnógrafo, su amor por la arquitectura, el patrimonio y la historia le hace dedicar su tiempo libre durante 14 años a investigar, visitar, medir, fotografiar y dibujar 496 ermitas, recogidas en un libro que ya se considera como de referencia en la etnografía valenciana: “Las ermitas de la provincia de Alicante”, publicado por la Diputación de Alicante en 2004.

Siempre ávido de aprender, y apasionado como era de la música, cerca de cumplir los 80 años empezó a estudiar música y violonchelo en el Conservatorio de Villena. No contento con ello, se interesó por la lutería o construcción de instrumentos, técnica que fue aprendiendo hasta que, en 2011, con 82 años, construyó su primer violín.

En 2016, con 87 años, finalizó su novela histórica y autobiográfica “Lucas” e inició un nuevo proyecto: “Las ermitas del Camino de Santiago”, al que dedicó sus últimos 4 años, realizando un tramo de Camino por año, visitando y estudiando cada una de sus ermitas. Fui afortunada por acompañarle cada verano y disfrutar con él de su entusiasmo y pasión, quedando el último tramo por recorrer, previsto para el verano en que, con 91 años, nos dejó.

Ramón fue muchas cosas, médico, artista, fotógrafo, escritor, etnógrafo, músico y luthier, pero destaco a la gran persona que fue, generosa, cariñosa, buena, paciente, constante, entusiasta, atrevida y valiente. Y por encima de todo, en lo que aquí concierne, amante de su Elda natal.

No sé si algún día tendrá una calle en Elda, pero estoy feliz de ver que ocupa un lugar de privilegio en la memoria de los amigos que dejó en su pueblo y siempre ocupará un gran sitio en mi corazón.