Estas son las recomendaciones de los expertos tras el fin de la obligación de llevar mascarillas en el transporte público

València

El Consejo de Ministros aprobará el martes, 7 de febrero, que las mascarillas dejen de ser obligatorias en el transporte público, tras casi tres años llevándola en autobuses o metro. Salvador Peiró, investigador de Epidemiología del Instituto de Investigación Sanitaria, afirma que esta medida llega tarde porque ya no tenía sentido mantenerla. Detalla que es una medida que actualmente no tiene un efecto importante en la transmisión y más cuando no se aplica en otros contextos sociales no sanitarios.

La mascarilla sí que se mantendrá en los espacios sanitarios y farmacias. Peiró destaca que es una buena decisión hasta que pase la temporada de enfermedades respiratorias, que este año llegó antes de lo previsto, pero está pasando también más rápido, aunque cree que tarde o temprano también se tendrán que quitar.

La importancia de la vacunación

En todo caso, aunque la situación esté controlada, Salvador Peiró insiste en que es muy importante seguir vacunándose. El 30% de mayores de 80 años de la Comunitat Valenciana aún no se han vacunado con la cuarta dosis de la vacuna contra la covid-19. Una cifra que entre personas de entre 60 y 69 años asciende a más del 50%. El investigador cree que las vacunas siguen siendo imprescindibles para evitar muertes.

Según los datos del Ministerio de Sanidad, casi la mitad de personas mayores de 60 años de la Comunitat Valenciana no se han inmunizado este año con la cuarta dosis, unos 500.000, y estos grupos precisamente, siguen siendo los más vulnerables.

La recomendación de las enfermeras

En el marco de la retirada de las mascarillas en el transporte público el próximo 8 de febrero, las enfermeras expertas del Instituto Español de Investigación Enfermera del Consejo General de Enfermería (CGE) recomiendan seguir usándola en aquellos casos en los que se manifieste algún síntoma de infección respiratoria, ya sea covid-19, gripe u otras afecciones.

El presidente del CGE, Florentino Pérez Raya, afirma que "entiende" la decisión del Gobierno por "coherencia con el resto de los lugares con gran afluencia donde ya no se utilizan las mascarillas".

No obstante, advierte de que "sabiendo que hay que continuar con la desescalada de las medidas de protección, su uso debe seguir siendo recomendado para las personas que presenten algún síntoma de infección respiratoria, con el fin de proteger al resto de los viajeros".

Lo mismo ocurre con las personas que presenten enfermedades o comorbilidades que puedan verse empeoradas por afecciones respiratorias, que deberían usarlas en lugares donde haya mucha afluencia de gente y no haya una ventilación adecuada.

"Por lo tanto, apelamos a la responsabilidad de cada persona y recomendamos hacer una autoevaluación del riesgo según su situación en función de la actividad, contexto y de la vulnerabilidad que presente para valorar la necesidad o no del uso de la mascarilla", finaliza Pérez Raya.