Certezas y bulos sobre la nuevas leyes de protección animal

Valencia

Reconoce Amparo Requena, presidenta de AVADA (asociación de abaogados valencianos en defensa animal) y vicepresidenta de la sección de derecho animal del Colegio de Abogados de Valencia, que están muy preocupados con algunos de los cambios legislativos que están en tramitación parlamentaria así como de la reforma del Código Penal, pese a la incertidumbre que aún hoy sobre cómo quedará la redacción definitiva. Pero, asegura, existe un serio riesgo de que estos cambios legislativos supongan, en algunos casos, un retroceso en la protección de los animales.

Y muy especialmente en materia penal, pues los juristas especializados en la materia advierten de los riesgos de que se pueda introducir la disyuntiva de prisión o multa. Según Amparo Requena, esto sería un enorme retroceso después de lo que ha costado establecer penas de prisión para los peores delitos de maltrato a los animales. Poder optar a multa en lugar de prisión, significaría en la práctica despenalizar muchas de las atrocidades que se cometen con los animales.

En cuanto a las leyes administrativas, advierte Amparo Requena de la enorme desinformación, cuando no la propagación interesada de bulos que se observa, y que, posiblemente, sea consecuencia de la politización de los derechos de los animales. La abogada defensora de los animales nos cita algunos de esos bulos, así como otras cuestiones que parece sí va a incluir esta nueva regulación:

* La nueva regulación va a acabar con la caza: en absoluto, la caza seguriá siendo legal, lo único que exigirá la nueva ley es que los perros de caza tengan los mismos deechos de protección que el resto, y que estén, como todos, debidamente identificados. En este sentido, Requena crítica duramente la enmieda socialista presentada para excluir a los perros de caza y no considerarlos como animales de compañía.

* La prohibición de cría y venta de animales acabará con las razas autóctonas: no se prohíbe ni la cría ni la venta, pero sí que se regula. Todo el que quiera hacer criar a su animal de compañía puede hacerlo siempre que se inscriba en un registro de criadores, un mero trámite informativo. Se trata de controlar la cría indiscriminada. En cuanto a la venta, se podrá seguir comprando en tiendas, pero se acabará con la práctica de exponer a los cachorros en jaulas o urnas de cristal, sino que se pondrá en contacto al comprador con el criador. Asimismo, se regulará la venta fraudulenta en Internet.

* Se va a acabar con la participación de animales en cabalgatas y romerías: no se va a prohibir la participación de animales en estos eventos, pero sí se va a regular para evitar situaciones de maltrato que se observan en demasiadas ocasiones.

* Se va a prohibir tener como mascotas hamsters, conejos, periquitos o loros: otro bulo, dice Amparo Requena. No se está manejando ninguna lista que regule qué animales están permitidos, pero cree que se abogará por el sentido común, poniendo especial atención en animales que puedan ser peligrosos o especies invasoras, al menos así lo entiende Amparo Requena.

* Habrá que hacer un curso para adoptar o comprar un perro: sí, es una de las novedades de la nueva regulación legal que entrará en vigor presumiblemente en 2023. Pero será un cruso gratuito para concienciar al dueño de la mascota que se va a adoptar de unos conocimientos mínimos para garantizar el bienestar del animal. Se quier evitar las compras de perros como un juguete que se usa, y cuando nos cansamos, se abandona.

* Se establece un máximo de cinco animales por vivienda: esta novedad, que parece va a recoger tanto la ley nacional como la autonómica, es, en opinión de Requena un absurdo sin sentido jurídico, proporcionará situaciones como que las protectoras y perreras tendrán exceso de población mientras que hay hogares donde se impide la acogida.

* No se podrá dejar solo al perro: se trata de evitar el maltrato que significa tener a un perrro abandonado, atado o encerrado en una terraza más de 24 horas. Lógicamente, una ausencia de unas horas es inevitable, pero la ley solo actuará en los casos de abusos y maltrato. La ley quiere garantizar que el que tenga animales lo haga con unas mínimas garantías para el animal, y si no puede proporcionarlas, que no lo tenga.

* Esterilización: será obligatoria en los animales con los que no se pueden tener control directo (gatos que salen a la calle, perros que viven es semilibertad) pero si están controlados en un hogar no será obligatoria..