Empiezan las obras del puente de la calle Isaac Albéniz de Pinto que conecta La Tenería II con una zona industrial
Así, arranca un proyecto planteado en 2007, adjudicado a Pavasal en enero de 2023, y que por problemas en el terreno había retrasado el inicio de obras. El plazo de ejecución es de ocho meses

Salomón Aguado, alcalde de Pinto, habla sobre las obras del puente de la calle Isaac Albéniz.
00:20
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Pinto
El puente sobre las vías del tren, que parte del final de la calle Isaac Albéniz, está más cerca de ser una realidad después de que esta mañana se haya realizado el acta de replanteo, paso imprescindible para comenzar las obras, que arrancarán en los próximos días. Un acto al que han asistido el alcalde de la localidad, Salomón Aguado, responsables de ADIF y de Pavasal, empresa a la que se le adjudicaron las obras en enero de 2023 por 1,9 millones de euros. Las previsiones de ejecución de estos trabajos son de ocho meses.
Aguado ha destacado que se trata de una actuación muy demandada por los vecinos de La Tenería, que permitirá descongestionar Pinto de tráfico y asegura que cuando a termine el año, con la obra concluida, los vecinos habrán “ganado en calidad de vida”.
Proyecto de 2007
El proyecto de puente se planteó de forma inicial en 2007, aunque no estuvo aprobado hasta 2020 y con él se quiere conectar el barrio de La Tenería II con una futura zona industrial, el Sector I. Además, permitirá descongestionar el tráfico del centro del municipio, sobre todo en la avenida Antonio López, y en especial en las horas de más atasco de la autovía A-4, desviando los coches del casco urbano hacia la carretera M-506, dirección Fuenlabrada, y la M-423 hacía Parla.
En junio de 2023 el actual alcalde reclamaba una reunión con Adif para desbloquear la situación de unas obras que no arrancaban y solventar rápidamente los problemas encontrados. En diciembre de ese año se explicó que el retraso de las obras se debía a un problema en “la diferencia de cota de más de un metro” entre el proyecto de urbanización del Sector 1 y el del puente. Un “desfase de geodesia” que se debía solucionar para que Adif, encargada de dar la autorización de los trabajos, diera el visto bueno.