A qué delitos se enfrentan los ultras del Atlético de Madrid: "Hay que investigar lo que pasó antes del partido en redes sociales"
El presidente del Movimiento contra la Intolerancia adelanta en ‘La Ventana de Madrid’ el contenido de la denuncia que presentará ante la Fiscalía
Koke y Giménez, junto a la grada ultra del Metropolitano en el derbi madrileño
El presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, asegura que el episodio de violencia desatado por los ultras del Atlético de Madrid no empezó durante el partido que enfrentó el domingo al equipo rojiblanco con el Real Madrid, sino que lo hizo días antes. En una entrevista en La Ventana de Madrid, Ibarra ha explicado cómo había llamamientos en las redes sociales a insultar a Vinicius utilizando “subterfugios” para disimular las palabras ofensivas. “Pedimos a la Fiscalía que investigue todo: lo que pasó antes en redes sociales y el post-partido para ver todas las dimensiones de lo sucedido”, según Ibarra.
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Esa petición aparece recogida en la denuncia que el Movimiento contra la Intolerancia va a presentar ante la Fiscalía General del Estado y a cuyo contenido ha tenido acceso Radio Madrid. “Con anterioridad al encuentro de fútbol entre el Atlético de Madrid-Real Madrid, el jugador Vinicius había sido víctima de una campaña en redes sociales de clara naturaleza racista”. Señala además el llamamiento de ir al derbi “con una máscara para poder insultar a Vinicius, ocultando el rostro o usando disfraz para así evitar ser identificados y en un concierto previo para denigrar la dignidad o dañar la integridad moral del jugador”.
La denuncia presentada por el Movimiento contra la Intolerancia recoge también los insultos proferidos contra el portero del Real Madrid y cómo se destrozó la placa que rinde homenaje al guardameta en el conocido como “paseo de las leyendas atléticas”. El escrito solicita a la Fiscalía que investigue también la exhibición de símbolos nazis y la utilización de máscaras de ocultación.
Delito de odio
El Movimiento contra la Intolerancia señala el artículo 510 del Código Penal que hace referencia a los delitos de odio. “Serán castigados con una pena de uno a cuatro años de cárcel quienes públicamente fomenten, promueven o inciten al odio, hostilidad, discriminación o violencia contra un grupo”. Además, la ley también castiga con pena de hasta dos años de prisión a aquellos que lesionen “la dignidad de las personas mediante acciones que entrañen humillación, menosprecio o descrédito”.
Los otros delitos que, según el Movimiento contra la Intolerancia, podrían atribuirse a los radicales del Atlético de Madrid son alteración del orden público, “agravada por el uso de disfraces”. Y recoge expresamente cómo familias con niños pequeños se marcharon del estadio Metropolitano cuando el lanzamiento de objetos contra el campo obligó a suspender el encuentro durante más de un cuarto de hora.
En la entrevista en La Ventana de Madrid, Ibarra lamenta también que el Atlético de Madrid “no es colaborativo” a la hora de aportar pruebas cuando, en ocasiones anteriores, se han investigado hechos similares. “Lo idóneo es que haya colaboración de los clubes, pero también está la Brigada de Información de la Policía y el equipo de seguridad privada, que es conocedor de lo que pasa en las gradas”, sostiene el presidente del Movimiento contra la Intolerancia. Ibarra lamenta las “resistencias” para expulsar a los radicales de los estadios y se pregunta cómo es posible que una democracia no tenga capacidad para erradicar a los grupos ultras. “Tendrán que ponerse a actuar seriamente desde la Delegación del Gobierno al resto de instituciones del Estado de derecho”, concluye.
