Gabino Diego y su pasión por el teatro: “Cuando hice ‘Viaje a ninguna parte’ pensé que esa era la vida que quería llevar”

Getafe

Quino (Gabino Diego) es un guionista al que ha dejado su mujer, quien le pide que venda el piso como fin definitivo de la relación, pero él, enamorado todavía de ella, intenta por todos los medios que no se lo compren y acaba llegando a un compromiso de venta con tres personas muy diferentes, interpretados por Antonio Vico, Jesús Cisneros y Josu Ormaetxe. A partir de ahí se desarrolla una historia divertida en la que, entre otras cosas, se habla de la crisis masculina a los 40, aunque tiene un trasfondo más serio que también irá apareciendo según transcurre la historia

Gabino Diego llega con ‘La curva de la felicidad’ al teatro Federico García Lorca de Getafe este sábado, con el firme convencimiento de que el teatro debe servir “para convivir mejor y ser felices, algo que hace falta en estos momentos”, cuenta en una entrevista concedida a SER Madrid Sur. Reconoce que él era fan de esta obra, que lleva representándose casi 20 años, y llegó a ver dos veces. “Es una función con algo mágico”, además de “gusta mucho a las mujeres” y eso es fundamental para que triunfe, porque afirma que el público femenino es el que más va al teatro. “Veo grupos de mujeres que vienen al teatro y eso no ocurre con los hombres”.

Ampliar

El teatro “mi pasión”

Diego cumplirá 40 años en la profesión en este 2024 y aunque asegura estar abierto a cualquier proyecto cinematográfico que le propongan, confiesa que “el teatro es su pasión”. Y eso lo tenía muy claro desde que empezó. Es más, cuando rodó ‘Viaje a ninguna parte’ se dijo a si mismo que esa era la vida que quería llevar, viajar de pueblo en pueblo por España haciendo teatro. Lo más parecido a las giras que hoy en día realiza.

Es uno de los actores españoles de más prestigio, pero a eso se une haber conseguido el cariño y la simpatía del público y eso cree que también se consigue “no hablando de política, es uno de los secretos”, dice. “Quiero llegar a la gente. La gente me para, me trata con cariño y yo no pregunto a quien votan”.

Su proyecto más inmediato es seguir hasta octubre con las representaciones de esta obra, que este sábado hará reír a todos los que acudan a verles a Getafe.