Vive unos boloencierros en Mataelpino al más puro estilo de Indiana Jones por las fiestas patronales

Mataelpino

Mataelpino volverá a acudir, puntual, a su cita anual con los boloencierros, que, este año, contarán con una temática marcada por el arqueólogo más famoso del cine, Indiana Jones, con motivo del reciente estreno de su última película. Se trata de una cita que ya es considerada toda una tradición en la localidad que, cada año, atrae a cerca de 1.000 visitantes. Asimismo, se compondrá de una categoría para niños y otra para adultos y se desarrollará del viernes 25 al domingo 27 de agosto.

El Boloencierro de Mataelpino es una actividad creada con mucho entusiasmo por vecinos de la localidad y que se enmarca en las fiestas patronales de San Bartolomé, del 23 al 28 de agosto. En concreto, se trata de una carrera épica en la que los corredores son perseguidos por una bola gigante que rueda cuesta abajo por la fuerza de la gravedad, hasta llegar a la Plaza de Toros, donde se siente la energía del momento y mucho movimiento.

Como forma de homenajear al personaje cinematográfico, se celebrará un Boloencierro nocturno, rodeado de antorchas, con espectáculos de fuego y al son de los tambores, emulando la famosa escena de “En busca del Arca Perdida”.

Vuelve la bola grande

La bola grande, de casi 300 kg, lleva desde el año 2018 sin salir y, este año, el Ayuntamiento ha procedido a su restauración, para poder recuperar la esencia del evento que se venía haciendo hace años.

Los boloencierros darán comienzo el propio viernes 25 de agosto a las 11:00h con la edición infantil. Por otro lado, el sábado 26 los más jóvenes podrán repetir la experiencia a las 12:00h y, a las 13:15h, se sumarán los adultos.

El domingo 27 de agosto, por su parte, volverá el Boloencierro infantil a las 11:00h y el de adultos a las 11:54h.

Los adultos deben inscribirse

Se informa de que, para participar en las ediciones de adultos, es obligatorio inscribirse a través del correo electrónico boloencierromataelpino@gmail.com o el mismo día de la carrera.

Hace una década, Mataelpino buscó una solución a los recortes que, sin superar las ganas de mantener la tradición, obligaron a cambiar los toros por una bola de enormes dimensiones. En sus inicios, medía tres metros de diámetro, pesaba 200 kilos y estaba hecha de metal, resina o poliespán, pero el riesgo que tenía el uso de una bola con estas dimensiones y materiales, y los accidentes reiterados que pasaban año tras año, hicieron que se llegase al acuerdo de cambiarla y hacerla más pequeña, lo que, sin duda, ha mejorado la situación. Actualmente, se compone de plástico ligero. Además, los participantes están obligados a llevar casco.