Getafe presenta nuevas alegaciones para endurecer los límites a fundición Corrugados
El Ayuntamiento ha sumado diez folios de alegaciones a los problemas ambientales y de ruido de la acería
Getafe
El Ayuntamiento de Getafe ha presentado nuevas alegaciones para que se endurezca la Autorización Ambiental Integrada (AAI) concedida a la fundición Corrugados después de que la Comunidad de Madrid haya atendido las quejas vecinales y haya decidido iniciar una revisión de la citada autorización. Tanto el Consistorio como los vecinos afectados, especialmente en Juan de la Cierva y Los Molinos, llevan más de ocho años denunciando que esta empresa "incumple sus obligaciones al amparo de la Comunidad de Madrid y la Autorización Ambiental Integrada (AAI) que le concede, y que debería vigilar, la consejería de Medio Ambiente".
Una vez que la Comunidad de Madrid accedió en junio pasado a iniciar un proceso de revisión de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) que permite funcionar a Corrugados, el Ayuntamiento presentó una serie de requerimientos "para que sea más restrictiva y acabar con las molestias" de ruido, olores y contaminación. Ahora, tras reunirse con la Plataforma de Afectados por Corrugados y con Ecologistas en Acción, el Consistorio ha presentado otros 10 folios de alegaciones, "con el objetivo de que estas molestias desaparezcan por completo y recuperar el bienestar para todos los vecinos", según ha destacado en una nota. En lo que respecta al ruido, Getafe ha presentado hasta 11 medidas correctoras, destacando que se controle en zona residencial, un problema al que la Comunidad de Madrid "viene haciendo oídos sordos" desde hace tiempo "a pesar de que sentencias judiciales e informes señalan su responsabilidad al conceder la AAI". Además, en su escrito de alegaciones, el Ayuntamiento getafense identifica la aplicación de medidas en diferentes espacios de la fábrica para reducir el ruido y solicita que, mientras continúen los incumplimientos de la normativa sobre ruido, en la fundición "se trabaje tan solo en horario diurno". También se solicita medidas cautelares que aseguren el cumplimiento de los niveles sonoros e incluir los límites acústicos establecidos en la Ordenanza Municipal de Medio Ambiente tanto en zona residencial como industrial.
Por su parte, para el control de emisiones, el Ayuntamiento insiste en la necesidad de que se realice un estudio de afección sobre la ciudadanía, además de otros estudios técnicos para la reducción de las mismas. Además, también reclama que se cuente con un sistema de gestión ambiental que apueste por la prevención, y no por la corrección de incumplimiento como hasta ahora, y que se asegure el control de las emisiones difusas, eliminando ambigüedades planteadas.
Para aspectos como las escorias negras, se solicita un proyecto técnico que aspire dichas emisiones para que sean canalizadas y controladas, Para los olores, el Ayuntamiento critica la falta de homologación de la mayoría de documentos presentados, algunos de los cuales no cuentan ni siquiera con los responsables de los mismos, así como metodologías para su control que no parecen ser las adecuadas. Por ello, desde el Consistorio solicitan que Corrugados presente un plan de gestión de olores, prestando atención a las medidas preventivas, puesto que están constatadas este tipo de molestias, y que se basen en los focos de emisión de la propia empresa. El Ayuntamiento también ha presentado alegaciones con respecto a la chatarra que genera la empresa, puesto que actualmente no se puede garantizar la calidad de la misma, ni su trazabilidad, solicitando un nuevo sistema que cumpla con la normativa. "En caso de que estos requerimientos y las próximas alegaciones no se tuvieran en cuenta, el Ayuntamiento acudirá a los tribunales contra la Comunidad de Madrid para atajar la indefensión vecinal tras años de problemas", concluye el Consistorio.