20 años del crimen de Sandra Palo, una muerte que conmocionó a España
Analizamos el rapto, violación y “vil” asesinato de esta joven getafense desde un punto de vista criminológico
El criminólogo Alberto Albacete analiza el crimen de Sandra Palo, 20 años después
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Getafe
“… cuando estaba vistiéndose la atropelló golpeándola contra el muro. Seguidamente la arrastra… pasando por encima del cuerpo de Sandra entre ocho y diez veces… con la finalidad de ocultar cualquier vestigio… propone a los menores la compra de gasolina para quemar el cuerpo. Al llegar al lugar… observan como Sandra Palo Bermúdez estaba viva y movía sus brazos y a pesar de ello procedieron a rociarla con la gasolina y prenderle fuego, lo que produjo la muerte de la joven…”
La lectura de los hechos que hizo la fiscal durante el proceso penal que en 2005, dos años después de los hechos, juzgó a los culpables del secuestro, violación y asesinato de la joven getafense Sandra Palo es suficientemente terrible como para ponernos en situación de lo ocurrido un 17 de mayo de 2003 en un polígono de Leganés. Hace justo 20 años.
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Alberto Albacete, profesor asociado de Criminología en la URJC y Jefe de la Policía Local de Valdemoro, ha valorado en Hoy por Hoy Madrid Sur, desde el punto de vista criminalístico, lo ocurrido ese trágico día y la situación de los condenados.
“La fiscal hablaba de un asesinato cruel, vil y sanguinario”, ha querido recordar sobre la muerte de Sandra, una joven con un 53% de minusvalía lo que la colocaba en una situación de especial vulnerabilidad.
Una de las preguntas clave es como un joven de 18 años y varios menores pudieron cometer este terrible asesinato. “Vemos reflejadas un montón de teorías criminológicas como la del aprendizaje social”, ha asegurado en relación, por ejemplo a Rafael Fernández García, ‘El Rafita’, que “vive en un entorno de delincuentes. Eso es lo que aprende y cómo vive, haciendo una especialización del crimen hasta llegar a este punto”.
Junto con él fueron condenados Francisco Javier Astorga Luque, ‘El Malaguita’, mayor de edad cuando cometió los hechos, y Ramón Santiago Jiménez, ‘Ramón’, y José Ramón Manzano Manzano, ‘Ramoncín’.
“Los delincuentes se van perfeccionando también. Hay una evolución delictiva desde robos con tirones a disparar con perdigones desde la ventana de su casa. Es la evolución delincuencial”, explica.
Luego está el aspecto de la justicia. “Hubo mucho debate sobre la aplicación de las penas, la Ley del menor y la reinserción”, ha remarcado.
“¿Qué ocurrió con este chico cuando salió? Tuvo verdadero seguimiento periodístico y se hizo grande dentro de su entorno delincuencial, se convierte en un famoso y en un héroe en su entorno”, concluye Albacete en lo que debería ser una reflexión de los medios de comunicación.
