“Hacemos Hogar” el nuevo modelo residencial que lucha contra la soledad no deseada en la Sierra Norte de Madrid
Se trata de un programa piloto destinado a los mayores de 60 años, se busca proporcionar atención para la prevención de la dependencia y el fomento de la autonomía a través de viviendas comunitarias para 12 personas
Entrevista al director general del mayor y dependencia, Juan José García, sobre el programa 'Hacemos hogar'
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Gargantilla del Lozoya
La Comunidad de Madrid ha puesto en marcha un nuevo modelo de atención residencial a través del proyecto “Hacemos Hogar”, un programa piloto destinado a los mayores de 60 años residentes en la Mancomunidad Sierra Norte. El objetivo es impulsar la prevención de la dependencia y fomentar la autonomía a través de viviendas comunitarias, con capacidad para 12 personas.
La iniciativa ya ha comenzado en el centro de mayores de Gargantilla del Lozoya. Allí se proporciona un servicio de prevención de la dependencia y promoción de la autonomía personal, promoviendo hábitos de vida saludables y actividades orientadas al envejecimiento activo. Los residentes también disponen de teleasistencia y recibirán atención especializada en caso de precisar de apoyos complementarios.
Esta primera experiencia es posible gracias al convenio firmado entre la Comunidad de Madrid y la Mancomunidad Sierra Norte. Gracias a este acuerdo, la Mancomunidad selecciona a los usuarios, que deben respetar el reglamento de convivencia y comprometerse a colaborar en la prestación de apoyos y ayuda mutua, en caso de ser necesario.
“Hacemos Hogar” está dirigido a personas de más de 60 años empadronadas en cualquiera de las localidades que integran la Mancomunidad Sierra Norte, que puedan desarrollar una vida autónoma o requieran de una supervisión limitada y presenten una situación de soledad, ausencia de apoyos familiares o sentimientos de desarraigo que supongan una grave vulnerabilidad.
Con este proyecto se continúa explorando nuevas formulas para que las personas mayores permanezcan el mayor tiempo posible en su entorno y, posteriormente, puedan optar por modelos alternativos a las residencias. Siempre buscando dar respuesta a las situaciones de soledad no deseada. En función de los resultados, esta iniciativa podría extenderse a otras localidades.
