Autorizan una intervención arqueológica preventiva en la Real Fábrica de Cristales de La Granja
La propuesta está vinculada al proyecto de reurbanización de la calle principal y su eje transversal tiene como objeto documentar posibles evidencias arqueológicas
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Imágenes del exterior de la Real Fábrica de Cristales de San Ildefonso
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Segovia
La Comisión Territorial de Patrimonio Cultural de Segovia ha mantenido una reunión que ha sido presidida por la delegada territorial de la Junta, Raquel Alonso Pérez. Entre los asuntos tratados, se ha autorizado una intervención arqueológica preventiva en la Real Fábrica de Cristales de San Ildefonso, declarada Bien de Interés Cultural.
El objetivo del proyecto es organizar y sustituir, en la medida de lo posible, los distintos servicios que atraviesan el recinto, como redes de pluviales, suministro de agua, gas natural, electricidad y telecomunicaciones. Durante la ejecución de las obras, se realizará un control arqueológico de los movimientos de tierra. En caso de descubrir estructuras de valor histórico, se procederá a su limpieza manual, registro fotográfico y levantamiento planimétrico. Si las evidencias halladas tienen relevancia suficiente, se adoptarán medidas para minimizar el impacto arqueológico, en coordinación con el Servicio Territorial de Cultura de Segovia.
Por otro lado, la Comisión ha aprobado el informe técnico de un control arqueológico en una zona de Protección Arqueológica Integral, según el PEAHIS, situada en la Plaza Mayor.
La intervención, autorizada en julio de 2024, ha permitido documentar una galería subterránea de 46,2 metros de longitud, correspondiente a un canal derivado del acueducto. Esta galería subterránea fue, en origen, una derivación de agua del canal madre del acueducto soterrado hacia el antiguo barrio de La Judería. La construcción fue ampliada en cota en la mitad inferior en el siglo XX para ser utilizada como conducción extractiva del saneamiento de los aseos. Además, se han observado otros retoques y ampliaciones en los paramentos, sobre todo al inicio de la galería desde los aseos.
Los últimos trabajos se han limitado a la limpieza del conducto, sin necesidad de adoptar medidas de protección arqueológica adicionales. El proyecto también ha contemplado la instalación de un entubamiento para la extracción de vertidos de los aseos mediante el canal acondicionado en el siglo XX.