Alberto Marcos denuncia ante la Junta Electoral “prácticas irregulares y fraudulentas” del PSOE
El que fuera número 3 de la candidatura socialista revela haber sido víctima de presiones y acoso del partido hasta que decidió abandonarlo y quedar como concejal no adscrito
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Momento de la votación del concejal socialista Alberto Marcos en el pleno de investidura / Vicente Herrero
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Aranda de Duero
Alberto Marcos acusa a la agrupación local socialista de Aranda ante la Junta Electoral de Zona de lo que considera "prácticas irregulares y fraudulentas" por parte del grupo socialista de Aranda. El que fuera número tres de esta candidatura, concejal no adscrito desde julio del año pasado por voluntad propia, comienza explicando en su denuncia su perplejidad cuando un mes antes de las elecciones municipales exigieron a los miembros de la candidatura firmar un documento de renuncia anticipada al acta de concejal en caso de resultar electos, como requisito indispensable para poder integrar la lista oficial presentada ante el juzgado.
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Dice que después se quedó tranquilo cuando supo que "según la normativa, dicho documento de renuncia solo podía ser presentado de manera efectiva ante el consistorio por la propia persona afectada", aunque la obligación de firmar dicho documento ya constituía una irregularidad en sí misma. Pero el siguiente capítulo llegó un tiempo después cuando el partido comenzó a presionarle para que renunciara a su acta de concejal. Detalla que el portavoz del grupo y secretario general de la agrupación local intentó que firmara un poder que le permitiría interceder en su nombre ante el Ayuntamiento. Al negarse, "comenzó una estrategia de aislamiento y presión", limitando su capacidad para ejercer sus funciones en el Consistorio.
Marcos continúa explicando que al haber llegado la situación a un punto insostenible, decidió dejar el grupo socialista y pasar a ser concejal no adscrito "priorizando el bienestar de mi pueblo por encima de intereses partidistas", detalla en su escrito a la Junta Electoral de Zona, a la que solicita que se investigue esta situación.
Termina su argumentación asegurando que no es el único afectado por estas prácticas, puesto que la que fuera en el número 7 de la candidatura, Elena Abajo Villahoz, decidió abandonar tanto el grupo municipal como el partido, lo que "pone de manifiesto la gravedad de los hechos y la necesidad de una investigación que esclarezca lo sucedido", concluye.