La Junta advierte de sanción si no se retira el mineral acumulado en parcelas de la concursada UMINSA
El Ayuntamiento de Fabero y la Guardia Civil denunciaron los riesgos para el Medio Ambiente y la seguridad
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Ponferrada
La Junta de Castilla y León advierte del inicio de un proceso sancionador si no se retira el carbón acumulado en las inmediaciones del pozo Alicia, así como en el resto de parcelas afectadas por el proceso concursal de UMINSA y sobre las que la asturiana MINARSA adquirió supuestamente el mineral y el escombro acumulado. Así lo confirma el propio Jefe del Servicio Territorial de Industria, Fernando Bandera a estos micrófonos, después de que se haya despertado "el tiburón" de la custodia. Asegura Bandera que es la segunda vez que se hace el requerimiento. El primero fue hace seis meses, y dado que no se hizo nada, ahora se ha tramitado ya el aviso de sanción.
De hecho la Junta actúa a respuesta de una denuncia de la Guardia Civil y del ayuntamiento de Fabero en la que advertían de los riesgos medio ambientales y de seguridad que podrían producirse.
La Alcaldesa, Paz Martinez Ramón, ya pidió en 2020 que se retirase esa montaña que se encuentra a la entrada del pueblo y en el entorno declarado Bien de Interés Cultural, y que fue objeto de la guerra del carbón entre Hunosa y Alonso. "Se trata de evitar que los residuos perjudiquen gravemente", sigue sosteniendo Ramón. El proceso Concursal de Uminsa paralizó todo y ahora el siguiente pulso está entre Alonso, que pide el pago de un alquiler por tener el carbón cuya propiedad ha pasado a Minarsa, antes de que se lo lleve.
Ya saben que Minarsa intentó la semana pasada llevarse el mineral, pero personal del grupo Alonso bloqueó con maquinaria el acceso e impidió que pudiesen salir todos los portes. Solo 11 camiones han conseguido abrirse camino, mientras que Minarsa calcula que serán dos mil los que hagan falta para retirar las 40.000 toneladas de carbón que quedan en las inmediaciones del pozo Alicia. La titular del carbón busca además la adjudicación del transporte a otra empresa después de que la anterior contratada se negase a seguir por inseguridad para sus camioneros.
El mismo problema se ha producido en Alinos, en Toreno, y en las instalaciones de Guardo, en Palencia.