Emprendimiento con éxito en Canalejas de Peñafiel

Peñafiel

Allá por 2014 Raquel de Dios quiso dar el paso y comenzar su emprendimiento. Conocía el mundo de las trufas y se lanzó a plantar encinas. Hizo una buena inversión y sabía que los beneficios, al igual que el fruto, tardarían en salir. En total, siete años. "Cada año la producción va aumentando poco a poco, aunque no es fácil de cuantificar porque luego alguna trufa puede salir mal, entonces la reutilizamos para que deje esporas en las plantas", explica.

De Dios ha aprendido a ser empresaria. A ver oportunidad de negocio no solo en la propia trufa, que vende presencialmente y envía a restaurantes de la zona y de todo el país, sino también a generar y crear turismo en torno a este alimento, a su forma de recolectarlo, y de degustarlo. El trufiturismo está de moda, y lleva a muchos curiosos hasta Canalejas.

Pero aún hay más. Porque la innovación -eso que ahora llaman I+D+I- le ha llevado a probar nuevos productos, como miel con trufa, que bien pueden permitir abrir mercados desconocidos. En todo caso, RF Trufas sigue en expansión. Y Raquel de Dios se muestra feliz porque en su momento dio un paso clave, que aunque tenía sus riesgos, ya ha dado sus frutos. Nunca mejor dicho.

La charla al completo puede reproducirse en el audio superior.