Un sueño de varios comerciantes que se hizo realidad: el Teatro Cine Aranda cumple 90 años
Máximo López Vilaboa relata en la SER cómo fueron sus inicios y su curiosa historia
El sueño de los comerciantes que se hizo realidad: el Teatro Cine Aranda cumple 90 años
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Aranda de Duero
En este viernes 17 de enero Aranda de Duero está de aniversario. Y muy especial. Porque hace 90 años se inauguraba oficialmente, en plena calle Postas, un edificio emblemático por todo lo que ha suscitado en todas estas décadas. El Teatro Cine Aranda. El artífice que creó este fantástico edificio es el arquitecto Alfonso Fungairiño Nebot, cuyas obras racionalistas son perfecta simbiosis entre funcionalidad y vanguardia.
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La radical propuesta racionalista del Cine Aranda parte de una limpieza de planos sin ornamentación alguna en fachadas. Las carpinterías metálicas y los óculos, propios de la ingeniería naval, logran una brillante composición que se entiende en su plenitud desde el otro lado del Duero, cuando la corriente de agua invade la parte inferior del edificio. Un buque emerge del Duero, la proa se nos presenta como un cubo rico en ventanas que miran al horizonte, la popa se muestra como un gran rectángulo apaisado en el que solo hay licencia para prolongar la terraza delantera. A estribor, la calle Postas, a babor, el Duero.
Se ha señalado que el Cine Aranda sigue los postulados típicos de la propuesta general de salas de espectáculos de los años 30: ojos de buey, remates curvos y barandillas metálicas siguiendo modelos de la construcción naval. Fungairiño aporta elementos de gran originalidad que lo alejan de otras salas de cine de la época.
Pese a las formas estrictamente arquitectónicas del Cine Aranda, el edificio podrá estar dotado de movimiento por el diálogo que establece con el río. La iniciativa de levantar un cine en Aranda surgió del comerciante arandino Joaquín Valdazo Viyuela (1879-1963), que durante 1931 expondría el proyecto en el escaparate de su comercio de la calle Santa Lucía. El director general de Obras Hidráulicas, Demetrio D. de Torres, por resolución de 30 de mayo de 1933, acordó “conceder a don Joaquín Valdazo Viyuela, vecino de Aranda de Duero, una parcela de terreno de dominio público, perteneciente a la ribera derecha del río Duero, en el sitio llamado Las Traseras de dicha villa, con extensión superficial de 824 metros cuadrados”.
El 'Cine de Arriba' y el de 'Abajo'
Simultáneamente a la construcción del Cine Aranda se va a edificar otro en la confluencia de la calle Isilla y la Plaza del Trigo, que se conocerá como Teatro Cine Principal Palace, donde se ubica desde 2003 el Auditorio Cultural Caja de Burgos. El 3 de enero de 1933 se firma escritura de compraventa de lo que se conocía como Caserón de los Nobles. Las obras comenzaron en mayo y el empresario era Segundo Mayayo. La convivencia durante décadas de ambos cines hizo que el de la calle Isilla fuese conocido popularmente como “el cine de arriba” y el Cine Aranda, como el “cine de abajo”.
De la inauguración del Cine Aranda se tomó una emblemática fotografía con las principales personalidades que asistieron. En la imagen podemos ver, de izquierda a derecha a las siguientes personas: José Alejandro Quintana Rozas (abogado y alcalde de Aranda entre 1901 y 1912), Julián Requejo Lobo (comerciante arandino y vicepresidente de la Tertulia), Gabino Cisnal Deu (Bombero, funcionario municipal y acomodador del cine), el Capitán del destacamento de la Guardia Civil, Alejandro Arranz Semolinos (Empresario agrícola), Eugenio Romera Ontoria (copromotor del Cine Aranda), José Mañero Miguel (Representante de la Sociedad de Autores en Aranda), José Martínez de Velasco (Ministro del gobierno de la República entre 1934 y 1935), Emilio Uña Muñoz (Director de la sucursal del Banco Hispano Americano en Aranda), Calixto Seijas Ruiz-Zorrilla (Fundador de la bodega Torremilanos y Alcalde de Aranda entre 1931 y 1932), Bernardo Rodríguez García (comerciante arandino), Jesús Arranz (acomodador del cine), Joaquín Valdazo (copromotor del Cine Aranda) y Ricardo Gallego (Industrial zapatero). No acudió al acto de inauguración por motivos personales el tercer copromotor del Cine Aranda, que era Andrés Miguel Marín.
Cómo se gestó
Para llevar a cabo este sueño, Joaquín Valdazo consiguió involucrar a otros dos socios, también comerciantes de Aranda, y que eran Andrés Miguel Marín y Eugenio Romera Ontoria. Inicialmente, Joaquín Valdazo tuvo otro socio de Madrid con el que no llegaba a cerrar ningún acuerdo y así lo recordaba en una entrevista de diciembre de 1934, con la inauguración ya muy próxima. El 30 de diciembre de 1934 se estrenó el aparato de proyección con dos sesiones de la película mexicana 'Sagrario'. Para el jueves, 17 de enero de 1935, se programó la inauguración oficial con un cuadro artístico compuesto por actores aficionados de Aranda, dirigidos por Matilde Miranda. Se puso en escena la comedia 'El Refugio', de Pedro Muñoz Seca. La función fue benéfica a favor del Asilo de Aranda y se recaudó la nada despreciable cantidad para la época de 1.000 pesetas.
Establecimientos
Desde 1935 son innumerables las sesiones cinematográficas que se han celebrado aquí, a lo que hay que añadir obras de teatro y variados actos sociales. En el mismo edificio ha habido un establecimiento que se llamó inicialmente Bar Guijarro para después adoptar el más orientador nombre de Bar Cine Aranda. En la actualidad es un Domino’s Pizza. Los pisos superiores estaban destinados para salones de celebraciones y banquetes. También ha sido sede del Casino Artístico. La función originaria de este edificio se sigue cumpliendo gracias a que Cine Club Duero proyecta semanalmente títulos de autores independientes y de gran calidad artística, al margen de las carteleras más comerciales.
La charla con el autor de este texto, Máximo López Vilaboa, puede reproducirse en el audio superior.