El PP exige a la alcaldesa de Bembibre una disculpa pública tras la sentencia que absuelve de prevaricación al exalcalde Otero por ampliar el contrato de Clece
Los socialistas no han recurrido la sentencia de la Audiencia Provincial de León
Ponferrada
La Audiencia Provincial de León ha absuelto al ex alcalde de Bembibre, José Manuel Otero, del delito de prevaricación administrativa del que le acusó el exportavoz del Partido Socialista en el Ayuntamiento, Manuel Ángel Rey, hace siete años como consecuencia de la prórroga del contrato realizada a la empresa Clece y con la que se ampliaba la gestión a la Residencia el Santo y a las piscinas municipales. Junto a Otero, la audiencia también ha absuelto a sus cinco miembros de la Junta de gobierno: Federico Fernández, Serafín Vázquez, Laura Álvarez, Gloria Castro y César Alfonso Ferrero, que dieron el visto bueno a la operación en el año 2013, aunque la denuncia no se presentó hasta el año 2017.
Ya el juzgado Nº8 de Ponferrada decretó aquel mismo año y a petición de la Fiscalía, el archivo de las actuaciones por no apreciar indicios delictivos en una decisión, que se atribuyó a la ausencia de informes técnicos que advirtieran del procedimiento irregular. En 2018, sin embargo se aceptó el recurso de reforma y se abrió un nuevo procedimiento que mantiene la sentencia absolutoria al no encontrar pruebas de actividad delictiva y subraya que “no ha podido acreditarse en la causa que los acusados actuaran con plena conciencia de ilegalidad, de forma arbitraria y a sabiendas de la injusticia de las resoluciones dictadas”.
Desde el partido popular y el propio exalcalde José Manuel Otero, se exige a la alcaldesa socialista una disculpa pública por haber utilizado, dicen, este caso para buscar réditos políticos y hacer daño en los medios de comunicación. José Manuel Otero remarca que no es una cuestión del PSOE sino de la mala fe de la actual alcaldesa socialista, Silvia Cao.
Otero remarca que fue el secretario municipal el que les animó a realizar esa contratación, aunque posteriormente se puso de baja en el momento de llevarla a pleno. Ese movimiento hace pensar a Otero que el funcionario también estuviese en el ajo en una estrategia judicial que, precisamente, dice el popular defiende desde su despacho de abogados el compañero de la propia alcaldesa.
Otero, que ya está al margen de la política municipal, descarta darle la vuelta judicial a este proceso, aunque anima a otros de sus compañeros a poner firme a una alcaldesa que dice lleva cinco años sin hacer nada y perdiendo oportunidades como el edificio Villarejo o la transformación de la finca del notario en un aparcamiento. Todo, dice a cambio de un sueldo obsceno.