El Tubos Aranda abre su regreso a la Asobal ante el subcampeón de Liga
El partido ante Bidasoa se juega a las 19 horas del domingo en el pabellón Santiago Manguán
Javier Márquez, entrenador del Villa de Aranda, en los estudios de la Cadena SER / Radio Aranda
Aranda de Duero
Reto mayúsculo para iniciar la Liga. El debut del Tubos Aranda ante el equipo que en las tres últimas temporadas ha sido segundo clasificado. Hacerlo mejor era imposible porque el primer puesto siempre está garantizado para el Barcelona.
El equipo de Javi Márquez llega bien al enfrentamiento con el Bidasoa, después de una muy buena temporada y, en opinión del técnico “adaptados los nuevos jugadores y matizada y asimilada la propuesta de juego que, necesariamente tiene que ser diferente a la pasada temporada”.
Un balonmano distinto, con jugadores más pesados, por lo general menos velocidad, un juego mucho más elaborado “aunque Bidasoa sí es un equipo distinto que corre mucho e imprime mucha velocidad. Tiene muchísima calidad, grandes jugadores pero, nosotros haciendo bien las cosas no debemos renunciar a nada”.
Facilita un dato Javi Márquez que es demoledor haciendo referencia a que “las estadísticas muestran que en un 94% de posibilidades los equipos que ascienden pierden la categoría. Es una estadística que se puede romper. Salvo en Barcelona y otros tres equipos más, con el resto no hay grandes diferencias y jugamos con el apoyo de la mejor afición de España”.
El Ayuntamiento incumple con los LEDs
El club ha tenido un imprevisto que afecta a ingresar menos dinero y gastar más. La Asobal exige la instalación de una serie de Leds para proyectar los mensajes publicitarios y el compromiso del Ayuntamiento de Aranda de llegar para el inicio de Liga no se ha visto cumplido.
El Villa de Aranda sabe que no estarán para las dos primeras jornadas en casa por el momento. Este imprevisto le ha obligado a tener que buscar un alquiler de leds, menos de los que precisa por el elevado coste de los mismos y un gasto que por ahora asume el club, que se traduce en unos 2.500 euros por partido y que, en condiciones normales, la concejalía de deportes debiera compensar.
