Los plásticos y toallitas también contaminan los ríos
El Ebro, en Miranda, y el Besós, en Santa Coloma de Gramanet, donde más residuos han encontrado los participantes en el proyecto 'Plastic Pirates'
Burgos
Los resultados de este año del proyecto europeo de ciencia ciudadana 'Plastic Pirates', desarrollado en Castilla y León por la Universidad de Burgos y la Fundación Oxígeno, confirman que, en la línea de los años anteriores, los plásticos de embalaje y las toallitas sanitarias de un solo uso son los residuos que se contabilizan en mayor medida en los ríos que se han estudiado. En la edición 2023/2024 de Plastic Pirates han participado un total de 20 centros educativos y asociaciones de Castilla y León, con casi 500 jóvenes implicados, que han muestreado 6 tramos de río durante el otoño de 2023 y 18 tramos de río en la primavera de 2024.
Este proyecto se inició en 2021 y, coordinado por el Centro Tecnológico BETA de la Universidad de Vic - Universidad Central de Cataluña (UVic-UCC), ha reunido a cerca de 1250 jóvenes de 32 centros educativos y asociaciones juveniles de España, que han muestreado distintos ríos de Cataluña, la Comunidad Valenciana y Castilla y León.
Las zonas de río con mayor número de residuos son las que rodean las ciudades y las zonas industriales. En Castilla y León, donde más se han encontrado ha sido en Miranda de Ebro; y en Cataluña, en el río Besós (Granollers) y Santa Coloma de Gramanet. Se ha observado que los plásticos son el mayor contaminante, seguido de papel, metal, vidrio, cigarrillos y comida. En Cataluña, en 2019 se adaptó la legislación relativa a la reducción del impacto de determinados productos de plástico en el medio ambiente y se espera que la tendencia de residuos plásticos en los ríos vaya disminuyendo.
La contaminación en ecosistemas fluviales, un ámbito poco estudiado
La Universidad de Burgos (UBU), la Fundación Oxígeno y el Centro Tecnológico BETA de la UVic-UCC, con la colaboración del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua – CSIC, han impulsado el desarrollo del mismo proyecto europeo de ciencia ciudadana para jóvenes en Cataluña, Castilla y León y País Valencia.
Los investigadores recogen y revisan los datos obtenidos por las escuelas, y los incluyen en la base de datos de residuos plásticos a nivel europeo. Los jóvenes utilizan materiales específicos como un kit de muestreo y un protocolo, y aplican técnicas científicas estandarizadas para analizar la presencia y tipología de residuos flotantes en la ribera de ríos y arroyos.
“A través de este proyecto de ciencia ciudadana, los jóvenes, fuerza motora del cambio, se conciencian de este problema, conciencian a su vez su entorno inmediato y, además, son parte activa junto con la comunidad científica al generar conocimiento científico que ayude a su solución”, comentan Patricia De La Fuente y Antonio Canepa, investigadores de la UBU y miembros del proyecto Plastic Pirates.
“Año tras año, los residuos se van acumulando en mares y océanos, donde interfieren con el desarrollo de las especies marinas y el funcionamiento del ecosistema”, explica Meritxell Abril, investigadora del Centro Tecnológico BETA y miembro del proyecto Plastic Pirates en España. Abril explica que, por ejemplo, "varios estudios han demostrado que las bolsas de plástico pueden ser trampas mortales para aves y tortugas marinas". La contaminación por plásticos ha sido muy estudiada en ecosistemas marinos, pero poco en ecosistemas fluviales. El proyecto, además de contribuir a la investigación de residuos plásticos en los ríos europeos, enseña a los jóvenes a utilizar el método científico y les conciencia de esta problemática ambiental.
El proyecto Plastic Pirates nació en Alemania en 2016 y está enfocado a grupos de jóvenes de distintos centros educativos, asociaciones y agrupaciones repartidos a lo largo de Europa. Junto a España, participan Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Eslovaquia, Francia, Grecia, Hungría, Holanda, Italia, Lituania y Portugal, lo que la convierte en una de las mayores redes de ciencia ciudadana dirigida a jóvenes que existen hoy en día. Este proyecto recibe financiación por parte de la Comisión Europea – Horizon Europe – en el ámbito de la “Misión: Restaurar nuestro océano y nuestras aguas para 2030” y cuenta con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) - Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.