El Juzgado Número 4 de Zamora tuvo que cerrar su sección civil un día
Los traslados y la baja del personal restante dejó vacía la sección y la obligó a cerrar, aunque sólo fuera por un día, mientras los profesionales no entienden cómo puede darse esta situación
Juzgados de Zamora
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Zamora ha tenido que cerrar durante un día esta semana su sección civil al quedarse sin personal.
Y no es la primera vez que este juzgado tiene problemas: ya el pasado año, tal como les contamos a finales de enero del 2023, fue noticia porque se acumulaban cientos de casos sin incoar y miles de escritos sin proveer, ante una concatenación de circunstancias con su plantilla de personal, por bajas, jubilaciones y traslados.
Hoy, más de un año después, la situación ha llegado a colapsar en la sección civil, tal como han confirmado fuentes de los profesionales de la abogacía y la procuraduría y han ratificado fuentes laborales.
En los juzgados, tanto funcionarios como profesionales de la abogacía o la procura, se muestran sorprendidos y no entienden que la administración judicial pueda llegar a provocar estas situaciones.
Los profesionales, o al menos algunos de ellos, recibieron una comunicación interna en la que se les informaba que la sección civil del Juzgado número 4 había tenido que cerrar al quedarse sin funcionarios, en unos casos por traslados y en otros por bajas laborales.
Una situación que llevó a la decana judicial a reunirse con el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, al que comunicó la situación y reclamó un nombramiento inmediato de funcionarios para reabrir la sección civil.
Una gestión inmediata ha permitido reabrir la sección civil con una única funcionaria y a la espera de que tomen posesión varios funcionarios más en estas próximas fechas, según se anuncia a los profesionales de la abogacía.
Este viernes, sólo esa funcionaria atiende la sección civil, mientras los profesionales de la abogacía y la procura que andaban por allí se resignaban a la situación, aunque sin ocultar su malestar e indignación ante lo que les toca vivir.
