Expectación e inquietud en la Ribera ante el impacto inminente del concurso de traslados médicos y su proceso de estabilización

Aranda de Duero

Crece la preocupación en la comarca de la Ribera por el impacto de los movimientos que se avecinan en las plantillas médicas: una vez resuelto definitivamente el concurso de traslados de SACYL, el hospital de los Santos Reyes se enfrenta a la pérdida de alrededor del 40% de los profesionales que tenían una plaza fija en el hospital, mientras que sólo ha conseguido atraer una candidata a las 16 plazas que ofertaba en este proceso. En la actualidad el hospital tiene vacantes aproximadamente la mitad de sus 92 plazas de plantilla orgánica, es decir que se encuentra sin cubrir por un profesional titular, aunque en algunos casos están ocupadas con una interinidad.

Una delicada situación que la Consejería de Sanidad espera paliar en parte solapando la última etapa de este proceso (la toma de posesión de las nuevas plazas por parte de los profesionales) con una nueva convocatoria de plazas vacantes que en este caso se ofrecen al personal temporal que ha participado en el proceso de estabilización de plantillas obligado por la normativa europea. Dentro de este nuevo proceso el BOCYL publica hoy la convocatoria de 39 plazas vacantes en el hospital Santos Reyes. Aun siendo el 42% del total de las plazas con las que cuenta el hospital, ni siquiera son todas las que están descubiertas, puesto que SACYL no ha podido sacar a concurso la totalidad de las vacantes al no contar con suficientes candidatos con los requisitos requeridos para consolidar su situación laboral en SACYL. Es el caso de dos de las especialidades de las que el hospital comarcal tiene más necesidad, como Dermatología y Cardiología: el hospital ribereño ha perdido a todos sus especialistas, dos en cada caso, pero SACYL no ha convocado ninguna de estas plazas. Algo similar ocurre en Medicina Interna, especialidad de la que el hospital comarcal solo ofrece en este proceso dos de las cuatro plazas que han quedado vacantes tras el concurso de traslados.

Especialmente preocupante resultan los datos de Ginecología, que ha perdido a sus seis titulares tras el concurso de traslados. En este caso se ofrece la totalidad de los puestos de trabajo, como ocurre en Oncología, cuyos dos profesionales también han pedido cambio de destino, lo que deja la unidad sin facultativos. Otro tanto ocurre con Microbiología. Uno de los servicios sobre el que mayor inquietud planea es de la atención a partos, y no sólo por el déficit de profesionales de Ginecología, ya que también el área de Pediatría ha sufrido merma de profesionales con el concurso de traslados. En este nuevo concurso se convocan dos de sus cinco plazas. Tal y como han reconocido en varias ocasiones responsables de la Consejería de Sanidad la atención a los partos y cuanto los rodea es uno de los pilares sobre los que se sustenta la razón de ser de un hospital comarcal, hasta el punto de que su desaparición ha puesto en peligro la propia supervivencia de centros hospitalarios, incluido el propio Santos Reyes, cuya última crisis, en 2019, supuso incluso la intervención del entonces vicepresidente de la Junta.

Los datos también muestran la precariedad en la que han quedado dos servicios estratégicos para un hospital: Anestesia y Radiodiagnóstico, en las que según las plazas ofertadas han quedado vacantes tres de los siete puestos con los que cuenta la plantilla. Dos especialidades de cuyo correcto funcionamiento dependen el resto de las especialidades, tanto por la necesidad de pruebas diagnósticas en un adecuada atención al paciente, como por la obligada participación de anestesistas en todos los procesos quirúrgicos.

Muy tocadas quedan otros dos áreas especialmente sensibles: Psiquiatría pierde dos de sus tres profesionales, que son las plazas que se ofrecen, mientras que de los cuatro puestos que tiene la plantilla de Oftalmología han quedado vacantes tres, que también salen a concurso en esta nueva convocatoria. Por otra parte el área de Urgencias ofrece siete vacantes de los diez puestos de que se compone, aunque en este caso la situación es esperanzadora, puesto que una parte de estas plazas están ocupadas por médicos interinos que se han consolidado como personal fijo y es muy probable que ocupen su plaza en el hospital ribereño.

El resto de vacantes ofrecidas en el hospital comarcal son dos plazas de Análisis Clínicos, una de Digestivo, dos de Cirugía General, una de Farmacia, dos de Pediatría y una de Urología. En total la nueva convocatoria afecta a 17 de las 24 especialidades del hospital comarcal. Una situación similar afecta también a las consultas de Pediatría de Atención Primaria en los dos centros de salud de Aranda. El concurso de traslados ha dejado al centro de Salud Sur sin pediatras titulares, mientras que el Centro de Salud Norte tiene una plaza vacantes. Son tres puestos de trabajo que también se ofrecen en la actual convocatoria para la estabilización de plantilla.

Se trata de plazas que se ofrecen a médicos o licenciados sanitarios que han trabajado de manera temporal en SACYL durante al menos cinco años en un mismo puesto de trabajo. El proceso consolida su condición laboral como trabajador fijo, pero no en la plaza que ha estado ocupando hasta ahora. El proceso de estabilización otorga a estos facultativos la condición de personal estatutario fijo, pero ahora tienen que optar a una plaza en esta nueva convocatoria. Por este motivo SACYL confía en que no haya demasiados rechazos ni plazas que queden sin cubrir, ni siquiera las de difícil cobertura como las de Aranda, porque las renuncias supondrán para estos trabajadores la pérdida del estatus laboral que acaban de alcanzar.