Una planta de biogás en Junquera de Tera

El Ayuntamiento de Vega de Tera tiene sobre la mesa el proyecto de una empresa portuguesa para la instalación de una planta de biogás a partir de purines próxima al casco urbano del anejo de Junquera de Tera. Una instalación que técnicos de la empresa tienen previsto presentar a los vecinos afectados.

La alcaldesa de Vega de Tera, ayuntamiento al que pertenece Junquera, daba cuenta de este proyecto en el pasado pleno, al que también asistían una decena de vecinos. Y aunque será en ese encuentro entre técnicos, vecinos y ganaderos donde se informe del proyecto y se intente limitar el rechazo de la población, la decisión, dice Tamara Fuentes, alcaldesa de Vega, está en manos de la corporación.

La planta ocupará 26 hectáreas en las inmediaciones del anejo de Junquera de Tera, una localidad que ya arrastra hace tiempo problemas de abastecimiento.

Están proliferando este tipo de proyectos energéticos para aprovechar los purines y evitar el efecto contaminante de su vertido en tierra. Además de la anunciada por el grupo Ibereólica en Cerecinos de Campos, en la zona del Esla, en Barcial del Barco, Ganadería Casaseca, está ya tramitando la instalación de otra planta de biometano a partir del tratamiento anual de 180.000 toneladas de residuos ganaderos.

Y en la comisión de patrimonio se han despachado varias autorizaciones relacionadas con esa actividad. Se han concedido permisos de prospección arqueológica para una planta de valorización de residuos para la producción de biometano en Villardondiego y Toro, para otra de biogás en El Cubo de Tierra del Vino y otra de generación de hidrógeno verde en Villalpando y Villárdiga. También se ha autorizado permiso arqueológico para un parque solar fotovoltaico que se asentará en los términos de Pajares de Lampreana, Piedrahita, San Cebrián de Castro y Moreruela de los Infanzones.