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CSIF denuncia que los salarios de los trabajadores del Ayuntamiento de Burgos están un 28% por debajo del personal de otros municipios

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) presenta un estudio que refleja una pérdida de poder adquisitivo de los empleados municipales del 20% desde 2008.

Un estudio de CSIF muestra las diferencias salariales desfavorables de los trabajadores del Ayuntamiento de Burgos / CSI-CSIF

Burgos

Un estudio de CSIF muestra las diferencias salariales desfavorables de los trabajadores del Ayuntamiento de Burgos con otros municipios. De una relación de los 15 puestos de libre designación que más ganan en el Ayuntamiento de Burgos, CSIF denuncia la “cruda realidad” de la situación salarial de la plantilla municipal, muy desfavorable con otros municipios similares de su entorno de Castilla y León y de otras comunidades, hasta un 50% inferior en alguna categoría.

CSIF recuerda que el Ayuntamiento de Burgos lleva 24 años sin subidas salariales propias, lo que ha supuesto una pérdida del 20% del poder adquisitivo de sus retribuciones. Y si se compara con la subida del SMI (que en estos años ha supuesto un 62%) la diferencia se acentúa más. CSIF también remarca cómo las retribuciones por asistencia de ediles al Pleno, Junta de Gobierno y las distintas comisiones y consejos se ha incrementado en cinco años un 70%, aproximadamente, y las aportaciones mensuales a los grupos políticos se ha multiplicado por seis, incrementándose un 594%.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) señala que se ha podido crear una falsa percepción en los ciudadanos, “de una situación de privilegio de los empleados públicos del Ayuntamiento de Burgos, cuando la realidad es que el 98,5% de ellos han accedido mediante pruebas selectivas en base a la igualdad, mérito y capacidad”.

“Llevamos ya varios años denunciándolo y viendo cómo no se considera de forma justa las retribuciones del personal del Ayuntamiento. La Corporación anterior no llevó a cabo ningún reconocimiento salarial, como la prometida carrera horizontal; y la actual corporación, si bien en su discurso de presentación, tanto la alcaldesa como la concejala de Personal se refirieron a la motivación del trabajador del Ayuntamiento y a la carrera horizontal, no ha manifestado compromiso alguno después de ocho meses”, lamenta CSIF.

El sindicato independiente ha elaborado un informe comparativo con diez ayuntamientos de Castilla y León, Cantabria, La Rioja, Euskadi y Madrid, utilizando criterios de cercanía o de población similar, “que arroja diferencias sustanciales muy desfavorables en las retribuciones”.

En concreto, se han analizado los puestos genéricos más habituales y con mayor número de plazas, tomando datos de las Relaciones de Puestos de Trabajo (RPT) actualizadas a 2023, y como elementos de comparación los niveles, complementos específicos y de destino de cada categoría. Los ayuntamientos con los que se ha hecho la comparación son diez.

De Castilla y León, Salamanca (143.269 habitantes), Miranda de Ebro (35.639), Soria (39.112), Zamora (61.827) habitantes y Ávila (57.657); de Cantabria, Santander (172.221); de La Rioja, Logroño (150.808); de Euskadi, Vitoria, (253.093); y de la Comunidad de Madrid, Getafe (185.899) y Alcorcón (170.296 habitantes.).

Los resultados obtenidos son prolijos, apunta CSIF, destacando que, para las categorías más básicas como las de administrativo, auxiliar administrativo, peones especialistas, oficiales de 1ª y ordenanzas o subalternos, la diferencia con todos los ayuntamientos comparados sale negativa para los trabajadores municipales de Burgos, con unos porcentajes de valores medios desfavorables de -44%, -29%, - 38%, -50% y -39%, respectivamente.

Para las categorías correspondientes a los grupos técnicos de administración general y técnicos de administración especial (grupo A1 y A2), las diferencias con el resto de ayuntamientos son mayoritariamente negativas, de ahí que los porcentajes medios correspondientes sean también desfavorables, de -12%, -6% y -5%, respectivamente.

CSIF subraya, además, que, a esta situación retributiva desfavorable, hay que añadir la considerable falta de personal, el incremento de las cargas de trabajo, o la implementación de la administración electrónica sin preparación y formación, sin un periodo de adaptación ni supervisión. “La consecuencia de todo esto es que se está generando agotamiento, estrés (numerosas bajas) y desmotivación en el personal de este Ayuntamiento, que no se ve ni reconocido ni gratificado por el equipo de Gobierno”, advierte esta organización sindical.

“Como ha quedado evidenciado en este análisis, la mejora sustancial de las retribuciones es una cuestión justa y primordial para todos los trabajadores del Ayuntamiento de Burgos. Es lo que CSIF venimos demandando durante los últimos años, y es en lo que vamos a seguir centrando nuestros esfuerzos”, concluye.

 
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