La nueva ordenanza de terrazas de Palencia avanza con el objetivo de aprobarla en el Pleno de marzo

Palencia

Tras la dimisión de la concejala de área, Reyes Bodero, es la propia alcaldesa de Palencia, Miriam Andrés, la que ha tomado las riendas de una auténtica 'patata caliente'; la nueva ordenanza reguladora de terrazas en la ciudad. En las últimas semanas se han logrado avances y el equipo de Gobierno del ayuntamiento de la capital espera aprobar la nueva regulación en el Pleno del próximo mes de marzo.

Cabe recordar que se creo una comisión especial, una comisión específica, para la nueva normativa. Se trata de un proceso participativo que tiene en cuenta las aportaciones de las distintas partes afectadas como es el caso de grupos políticos con representación municipal, asociaciones vecinales o patronal, entre otros. En noviembre del año pasado varias informaciones daban por hecho que el proceso estaba a punto de cerrarse. Nada más lejos de la realidad. La marcha de la concejala Reyes Bodero evidenciaba que la tramitación se iba a alargar, tal y como ha ocurrido.

La mayor dificultad está en conjugar los intereses los intereses empresariales con el derecho al descanso de los vecinos. En definitiva, en cómo regular los horarios de actividad de veladores. Tal y como avanzó en su día Radio Palencia, para la patronal del sector hostelero, representada por CEOE Palencia, para el Partido Popular, ¡Vamos Palencia! y Vox, la invernal debería ir del 1 de octubre al 31 de marzo; mientras que el resto del año, del 1 de abril al 30 de septiembre, sería temporada de verano. Sin embargo, IU-Podemos aboga por alargar la primera hasta el 31 de abril, por lo que la veraniega comenzaría el 1 de mayo. En ese punto estaba la negociación en los últimos compases del año pasado.

Desde la parte vecinal, la Favpa proponía retrasar el cierre durante los días de diario en invierno a la medianoche y mantener el resto igual; mientras que el Partido Popular abogaba por retrasar el cierre en verano durante los fines de semana a las 2,30 horas. La patronal, por su parte, apostaba por que en invierno se cierre a la 1,00 y 1,30 horas, y en verano, a las 2,00 y 2,30 horas. Otro de los puntos que ha provocado controversia en la negociación se refiere al emplazamiento, distancias y dimensiones de las terrazas.